Ariel Villavicencio: “En la adolescencia advertí que mi voz era especial”
El artista local se refirió a su carrera como locutor y como músico sobre el escenario.
Una vez más, un talento local se suma a la columna de “Varones en vanguardia” que propone Diario 13 San Juan, con el fin de indagar sobre la vida de los artistas sanjuaninos.
Hoy es Ariel Villavicencio quien se presenta al decir: “Hola, mi nombre es Ariel Esteban, soy "ese señor pelado con voz grave con cara de malo...jajaj".
Luego el invitado se definió al decir: “Puede decirse de mí que soy optimista, cristiano, bonachón, a veces soy cansador, según mi hija mayor; también creo ser bastante creativo”.
Con una voz única que lo hace sobresalir en todo momento, Ariel comentó cuál fue el momento en el que descubrió que tenía un talento único: “Advertí que mi voz era especial en los primeros días de mi adolescencia, en el ´cambio de voz, mis viejos me lo hicieron notar enseguida, más adelante en el grupo de amigos´”, explicó el entrevistado.
“Es algo que va a todos lados conmigo, así que a donde iba y empezaba a hablar causaba cierto asombro. A mis 12 o 13 años ya tenía ´voz de trueno´”, recordó y agregó: “En lo laboral fue un camino con experiencias lindas y de las otras también, empecé en la radio de la iglesia que fue un ambiente contenedor y nutritivo. Luego empecé a necesitar crecimiento y maduración en lo laboral hasta que conseguí trabajo en el grupo Light y Milenium lo que no fue nada sencillo. De a poco mi camino en esta línea de trabajo se fue definiendo y brindándome herramientas que se van afilando en cada paso para seguir aprendiendo”.
Si bien la locución no es su principal actividad, Villavicencio comentó que le genera ingresos y que otra de sus pasiones es la música: “Siempre fue parte de mi vida, de chico siempre hubo al menos una guitarra en la casa, actualmente toco el bajo eléctrico en ´EXPIADOS´ que es mi banda de rock, también supe participar como coreuta (bajo) en el coro de la iglesia y en el vocacional de la Escuela de música”, relató.
Luego de casi dos años de encierro por la pandemia del coronavirus, el músico recordó la inesperada experiencia y dijo: “No había mucho para hacer, se hacía lo que se podía con los chicos para entretenerlos y a mí mismo. Hice varios trabajos de carpintería en la casa y arreglos que antes no podía por falta de tiempo. El encierro fue un periodo interesante, de auto conocimiento, pero menos mal que ya pasó”, dijo Ariel.
Con muchos proyectos en mente, el entrevistado comentó sus próximos pasos y aseguró: “Estoy terminando con un par de materias de mis estudios para poder avanzar y cerrar esa etapa, con la banda estamos tocando bastante y armando fechas para lo que queda de este 2022 y el próximo año seguiremos con esperanza y ansias de ver qué hay más allá”.
Para cerrar, Ariel no dudó en reconocer: “Sueño con concretar y alcanzar todo lo que el creador pensó para mí y con ver a mis chicos ser personas con vidas plenas y quiero estar con ellos lo más que pueda”, finalizó.