Con la ilusión a cuestas, chicos de Iglesia y Valle Fértil conocieron el Estadio del Bicentenario
Con gran entusiasmo, chicos de toda la provincia sueñan con una oportunidad en el club millonario.
Se concretó la segunda de tres jornadas en las que San Juan es epicentro de las pruebas para jóvenes talentos por parte del area de Captación y Scouting del Club Atlético River Plate, en el Estadio San Juan del Bicentenario.
Con más de 1900 chicos participantes, el gigante de Pocito fue escenario para una nueva convocatoria del club de Núñez.
Papás, profesores y niños de entre 10 y 16 años llegaron con sus ilusiones a cuestas, como un grupo de pequeños deportistas de Valle Fértil.
Darío López, quién tiene a cargo una escuelita de fútbol de la villa cabecera, comentó que "salimos esta mañana a las 4 de la mañana con 25 chicos, la verdad que una experiencia muy linda, junto a cuatro escuelas; San Agustín, La Cantera, Astica y la Escuela Municipal".
"Están muy emocionados, anoche no durmieron nada, la pasaron bien, la verdad que no tiene precio jugar en este estadio. No estamos lejos de las expectativas", añadió.
Sobre el manejo de las ansiedades por parte de los niños, Darío contó que "hay que saber que es una prueba, tratar de hacer lo mejor en estos 30 minutos de juego y no estar nerviosos". A la vez analizó que "se deben equiparar los lugares, en Valle Fértil no tenemos césped en ninguna de las canchas, un potrero, pero la ilusión con la que salieron y la felicidad de haber jugado acá ya es es un premio".
Por su parte, Roberto Elguera, de Iglesia, acompañó a su sobrino Dylan y contó que viajó además con otros 7 chicos, deportistas de los clubes San Lorenzo y San Martín de Rodeo.
"Mi sobrino prácticamente no durmió", señaló entre risas y brindó algunos detalles de la charla previa: "Le dije que se divierta y aproveche la oportunidad que tiene".
Entre los más chicos, un arquero de Rivadavia, Thiago, comentó que llegó hasta el gigante de Pocito con sus pares de una clínica de arquero del departamento. Con el Dibu Martínez como su máximo ídolo, el rivadaviense dijo estar un poco nervioso, aunque tranquilo esperando su oportunidad.