Estremecedor relato: Rompió el silencio la ex de Villa
Daniela Cortes dio detalles este lunes en la tarde, del maltrato que recibió por parte del jugador colombiano de Boca Juniors.
Este lunes, Daniela Cortés, ex pareja del futbolista Sebastián Villa, rompió el silencio en el programa Fantino a la tarde (por América) en medio de su denuncia por violencia de género contra el delantero de Boca. A raíz de los hechos desarrollados en la noche del 27 de abril y la madrugada del 28 de abril en la casa que compartían en el country Saint Thomas, y que derivaron en la causa que investiga la fiscal Verónica Pérez, de la UFI 4 de Esteban Echeverría. Sebastián Villa se encuentra imputado por el delito de “lesiones leves calificadas por el vínculo y por tratarse de un hombre contra una mujer mediando violencia de género, en concurso real con coacción agravada”.
La oriunda de Medellín se presentó en los estudios junto a su abogado Fernando Burlando y realizó un detallado relato de los episodios de violencia de los que acusa al punta del último campeón de la Superliga. La mujer acusó al jugador de haber sido el causante de la pérdida de un embarazo: “Era maltradator e intimidante. Temí muchas veces por mi vida, le tenía miedo a un golpe mal dado”.
Al describir los inicios de la relación con el futbolista, Cortés dijo: “Nos conocimos por una red social; al principio era una relación de ida y venida, luego establecimos vivir juntos. Cuando él viene para Boca, le dieron un departamernto de Puerto Madero, y él habló con mis padres, para que viniera a vivir con él a Buenos Aires”.
“Cuando empezamos con la convivencia acá, él cambia por completo. Empiezan las agresiones, los insultos”, amplió, y puso una salida trunca con las parejas de Franco Armani y Rafael Santos Borré como un punto de quiebre. La mujer colombiana expresó: “Yo iba a salir con las esposas de otros jugadores y él era muy celoso. Y me decía que cómo iba a salir. que estaba acá con él. empezó a criticarme por cómo estaba vestida. Me decía ‘perra, no podés salir’. Yo lo que menos quería hacer era escándalo o problema, más estando en otro país”.
Cortés acusó a Villa de ofrecer dos rostros: “Cuando estaba expuesto en una cena era totalmente diferente, súper tranquilo. En casa se mostraba totalmente diferente; como pareja es horrible”. Posteriormente, relató una de las agresiones que aseguró haber sufrido cuando todavía convivían en Puerto Madero; “Empezamos una discusión y me pegaba con la mano cerrada o abierta, en el cuerpo, en la cara, tengo demasiadas cicatrices. Ese día dije que me iba a dormir a otra habitación y se enojó mucho, me empezó a pegar, a empujar, siempre me agarraba del pelo”.
Daniela señaló que en su momento llegó a denunciarlo estando de vacaciones en Colombia: “Se puso muy celoso, me empujó, me pegó, me tiró la bebida. Y le pedí a una amiga que me acompañara a hacer la denuncia”. A pesar de ello, se reconcilió al poco tiempo. Su denuncia incluye la pérdida de un embarazo por las agresiones, que buscó respaldar ante la Justicia con una serie de chats que aportó su hermana en su declaración testimonial.
La mujer expresó de que manera perdió su embarazo, “Nosotros teníamos la noticia, hicimos las pruebas de orina juntos, les contó feliz a los amigos en las concentraciones de Boca. Estaba de un mes y medio, dos, pero tuvimos una discusión. No le importó que estuviera en embarazo, me daba patadas en el estómago, me daba puños, me empujaba. Me pegó y, de tanto golpe, me tumbó. No decía nada, se encarnizaba pegando. Yo le decía: ‘Ojo con el bebé’. Él seguía pegando, no le importaba. Me encerré en el baño y estaba sangrando. Y llamé a una amiga y le conté que perdí el bebé”.
Como contradenuncia, Villa la acusó por extorsión y robo: señaló que Cortés lo amenazaba con denunciarlo y arruinarle la carrera en caso de abandonarla. “Lo que dice de la extorsión es ilógico, lo dijo después de mi denuncia”, refutó la ex pareja del delantero. “Mi familia me apoyaba con ese tipo de cosas, para sobrellevar la situación, nunca dependí de él económicamente. Cuando pasaban las cosas de violencia siempre viajaba a Colombia, era la única solución”, agregó.
“En la cuarentena el maltrato se incrementó. Lo mismo cuando tenía libre, y tomaba alcohol. Mi familia me decía: ‘Sal, vente para casa’. El 27 de abril desencadenó todo porque involucró a mi familia, haciendo llamadas amenazantes con grupos delincuenciales de Colombia. Mi mamá es una señora enferma, sufre de presión alta, y siempre se le ocultan los problemas para que no le hagan mal. Y a él no le importó, llamó a mi mamá, a mi papá. No aguanté más”, concluyó.