La Uruguay de Bielsa derrotó a la Selección Argentina por 2-0. La Celeste jugó un partido perfecto, en el que supo cuando pegar, cuando defender el resultado, cuando defenderse con la pelota y cuando cometer faltas. En La Bombonera, el clásico fue para el combinado uruguayo que se mostró concentrado la gran parte del encuentro, por lo que selló un merecido triunfo frente a los campeones del mundo por la fecha 5 de las Eliminatorias Sudamericanas clasificatorias al Mundial Estados Unidos, México y Canadá 2026.

Los muchachos de Marcelo Bielsa plantearon con mucha inteligencia el partido en la cancha de Boca. Fue así que la Albiceleste, comandados por el capitán Lionel Messi se mostraron casi siempre incómodos durante los 90’. Por lo que, de esta manera, la Celeste no solo se quedó con el clásico del Río de la Plata, sino que también le arrebató el invicto con puntaje ideal al equipo conducido por Lionel Scaloni.

En el primer tiempo, quedó claro que la Uruguay no sería un rival fácil, entre el planteo que intentó cortarle las vías de juego y una impronta de pierna fuerte que le imprimió al trámite un aire de final. De a poco, la visita comenzó a llegar, primero con Darwin Núñez apenas afuera, y después dos veces con Nicolás De la Cruz sin puntería. Julián Álvarez definió mal en la primera mitad, pero poco después, a los 41 minutos, rompió el cero el Charrúa cuando Marías Viña se le escapó por izquierda a Nahuel Molina, desbordó y mandó el centro pasado que logró conectar a la red el otro lateral, Ronald Araújo, para romper el récord invicto de 751 minutos del Dibu Martínez.

Enseguida, la Albiceleste intentó emparejar con un tiro libre de Lionel Messi que tapó con dificultad Sergio Rochet, antes de volver a frustrar al Cuti Romero en el rebote. Pero en el inicio del complemento volvió a tener éxito la visita a la hora de maniatar al anfitrión, que no encontró el camino pese a los tempranos ingresos de Lautaro Martínez para poblar más el ataque y Ángel Di María para aportar explosión en el medio: solo gravitó por un tiro libre de Lionel Messi que besó el travesaño.

Recién en la parte final Lautaro logró inquietar a Rochet con un cabezazo, pero a los 41, de contra, fue a fondo Uruguay cuando Darwin Núñez recibió en su campo, quedó mano a mano con Nicolás Otamendi, logró superarlo y se inclinó la derecha para enfrentar al Dibu y vencerlo con un disparo bajo al segundo palo.

No hubo mucho tiempo para más: la Celeste se llevó su merecido premio y la Selección el llamado de atención típico que recibe cualquier gran equipo cuando lo estudian en profundidad y lo desafían a reinventarse. La revancha será pronto, el martes ante Brasil en el Maracaná.