Es inminente la convocatoria a la mesa de diálogo salarial con los gremios estatales, adelantó a este medio una alta fuente oficial. Le pondrán fecha al primer encuentro. La intención es plasmar la iniciativa política cuando se avecina febrero y ya hay algunas discrepancias entre sindicatos sobre porcentajes pretendidos y, eventualmente, la continuidad de la cláusula gatillo.

El plan original sigue siendo el de siempre: que el diálogo se consume alrededor del 15 de febrero, con un par de semanas de antelación al inicio del ciclo lectivo 2023. Sin embargo, lo novedoso en esta oportunidad sería la convocatoria anticipada por la ministra de Hacienda, Marisa López, para poner paños fríos a la efervescencia sindical. Que el gobierno dé el primer paso, sería la síntesis.

Con un incremento del 100 por ciento acumulado entre enero y diciembre de 2022, los sueldos estatales quedaron por encima de la inflación oficial medida por el INDEC, del 94.8 por ciento. Con los haberes de enero vendrá una suba del 5,1 por ciento adicional, de acuerdo a lo informado oportunamente.

Sin embargo hay diferentes criterios entre los gremios. Mientras UPCN sostiene la conveniencia de la cláusula gatillo porque garantiza quedar siempre por encima de la inflación, otros como el Sindicato Médico entienden que es insuficiente porque significa correr siempre detrás del aumento de la canasta familiar, sin recomponer el poder adquisitivo real.

Días atrás una publicación del Sindicato Médico sentó posición al respecto: ya hablan de un 60 por ciento en una sola cuota. La primera reacción oficial -off the record- fue negativa. Entienden que es un pedido de imposible cumplimiento y sospechan que la interna entre gremios podría ensuciar el diálogo.

Frente a este panorama, lo más razonable parece dar algunas certezas. La primera de ellas sucederá esta semana, cuando le pongan fecha a la convocatoria para negociar salarios. De ese modo, el gobierno conservará la iniciativa política en la agenda.

Una advertencia resonó fuertemente en el gobierno tras el planteo del Sindicato Médico: hablar de un 60 por ciento en una sola cuota sería alentar falsas expectativas. No habrá margen para alimentar una pretensión semejante. Sin embargo, un antecedente le imprime un contexto diferente a esta negociación.

Los docentes autoconvocados marcaron el 2022, cuando miles de manifestantes desacreditaron el acuerdo al que habían arribado los secretarios generales en la mesa de negociación. Si este año se repetirá el fenómeno o no, nadie podría decirlo seriamente. Pero sin dudas aquel fantasma será un factor influyente tanto para los líderes sindicales como para los interlocutores del Ministerio de Hacienda.