Viñateros sanjuaninos prevén una cosecha 15% inferior a la última
Pese a que el INV había pronosticado una mejora en la cosecha en un 10% en comparación con 2024, desde el sector de los productores anticipan una temporada negativa. Los motivos.
Cuando se esperaba que el año de cosecha sea superior al último, factores climáticos y pestes juegan una mala pasada en el campo sanjuanino y anticipa un duro golpe a una de las actividades más importantes que tiene la provincia, como es la vid. Productores vitivinícolas creen que habrá entre un 10 y 15% menos de cosecha que el año pasado.
El pronóstico del Instituto Nacional de Vitivinicultura, había pronosticado una mejor cosecha respecto al 2024 y anticipaban un incremento del 10% al momento del levantamiento.
Es que el pronóstico que elaboró el instituto, menciona que sobre los 4.423.986 quintales que hubo de cosecha el año 2024, esta nueva temporada será mejor y se alcanzarán unos 4.861.800 quintales.
Sin embargo, desde el sector de los viñateros, entre el granizo, los calores por demás intensos, la peronóspora y la polilla de la vid (Lobesia), el pronóstico es totalmente contrario. El contraste que hallan desde el sector productivo es tal que anticipan que se cosechará entre un 10 y un 15% menos que el año pasado.
‘La cosecha va a ser menor. Las pestes seguramente van a aparecer después, va a depender de la zona productiva, porque hay grandes zonas productivas que son las más atacadas, mientras que hay otras de menor valor’, contó Rubén Gómez, dirigente de la Asociación de Viñateros Independientes.
Esto significa que, en un promedio, podrían cosecharse unos 685.700 quintales menos que la temporada anterior. En el mejor de los casos, si se cumple este pronóstico que anticipan los viñateros, la pérdida podría ser de unos 442.400 quintales de cosecha.
Los factores a los que le atribuyen esta merma tiene que ver ocasionales climáticos que hubo durante el verano. Pero el impacto puede ser mayor, ya que esperan que puedan aparecer más daños y otras pestes que impacte en la plantación, producidas por la combinación del calor y los daños de tormentas.
El otro impacto
Los viñateros cada año viven una intensa disputa con las grandes bodegas que son las que le terminan poniendo el precio a la uva. Si bien que haya menos cosecha es negativo, el aspecto que puede sumar es que al ver menos cosecha, el precio podría ser mejorado, más allá de la intervención de colaboración que prepara San Juan en conjunto con Mendoza para alzar el precio de las uvas.