Joaquín Sperani, un adolescente que había estado desaparecido desde el jueves en Laboulaye, Córdoba, fue encontrado muerto en una casa abandonada a 100 metros de su escuela. Otro joven de 14 años, amigo de la víctima, habría confesado el crimen ante la Justicia de menores. A continuación, se detallan los puntos clave sobre este homicidio que ha conmocionado a Córdoba.

Joaquín fue visto por última vez el jueves alrededor de las 16:00 horas, sin haber llegado a su colegio, el Ipem Nº 278 "Malvinas Argentinas". Esa misma noche, su madre denunció su desaparición.

Las primeras pistas revelaron que Joaquín no estaba en el aula cuando se tomó asistencia ese jueves, a pesar de que debía asistir a la escuela. Sin embargo, su bicicleta fue encontrada en el patio, aunque ningún compañero afirmó haberlo visto. El sospechoso, quien afirmó haber matado al adolescente, también proporcionó pistas falsas a la policía para retrasar la investigación.

El intendente local, César Abdala, confirmó que se trata de un homicidio y anunció que un compañero de colegio de Joaquín, también menor de 14 años, fue detenido. Este joven tenía en su posesión el celular del adolescente y finalmente confesó el crimen.

Se ha mencionado que Joaquín podría haber sido víctima de bullying por parte de otro amigo, lo que ha llevado a centrar la investigación en la relación entre la casa, la escuela y este amigo mencionado.

Uno de los vecinos que encontró el cuerpo en la casa abandonada describió la escena, afirmando que Joaquín estaba tirado con una campera de color y con heridas en el rostro. Afirmó que era evidente que estaba muerto y que no se trataba de un suicidio ni de un intento de quitarse la vida, sino de algo más.

Según las marcas encontradas en el cuerpo, se determinó que Joaquín murió a causa de un golpe contundente en la cabeza. La policía ha secuestrado un fierro y unos ladrillos que estaban cerca del cuerpo para su análisis forense.

En cuanto a las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, el intendente mencionó que se ve a Joaquín saliendo con sus amigos por las veredas, sin mostrar signos de estrés o nerviosismo, lo que genera incertidumbre sobre lo que realmente sucedió.