En Neuquén se vieron sorprendidos y preocupados por el hallazgo inesperado de una urna funeraria abandonada en un tacho de basura. El descubrimiento, realizado por un vecino el pasado lunes por la noche, desató una serie de especulaciones que mantuvieron en vilo a la comunidad.

La urna funeraria, de madera barnizada con manijas y una cruz de metal, fue encontrada dentro de un canasto de residuos ubicado en la calle Dr. Ramón, entre Brown y Avenida Argentina. Afortunadamente, el recipiente se hallaba en buen estado a pesar de su insólito paradero.

Tras recibir la alerta, las autoridades municipales de Neuquén se pusieron en marcha para investigar el incidente. Según los indicios recabados, se determinó que la urna debió ser depositada en el tacho de basura durante el día, lo cual desconcertó a las autoridades y a la comunidad por igual.

Cristian Haspert, subsecretario de Limpieza Urbana del Municipio de Neuquén, brindó algunas precisiones sobre el protocolo habitual en estos casos. Explicó que, según la ordenanza municipal, las cenizas suelen entregarse en una bolsa negra precintada, pero si los familiares desean utilizar una urna como la encontrada, pueden adquirirla de manera privada y recibir los restos en dicho recipiente.

Haspert expresó su consternación por el desafortunado hecho, calificándolo como "muy desagradable" y "impactante para muchos". Además, destacó lo inusual de la situación, señalando que si bien habían visto casos similares en el pasado, nunca antes habían encontrado una urna funeraria abandonada de esta manera en un tacho de basura.

El hallazgo generó interrogantes sobre las circunstancias que llevaron a esta acción y resaltó la importancia de respetar los protocolos y el cuidado de los restos mortales con el debido respeto y consideración hacia las personas fallecidas y sus familias.