En Mendoza se vivió una insólita situación que protagonizó un policía con su arma reglamentaria, y el hecho recorre el país. 

De acuerdo a lo informado por medios nacionales, el hecho ocurrió en la localidad de Guaymallén. El efectivo destruyó su arma reglamentaria cuando se la olvidó en el horno de su casa. 

Según trascendió, previo a salir del inmueble con su esposa, el policía escondió su arma reglamentaria en el horno. Pero cuando regresaron, comenzaron a preparar el almuerzo y a los minutos comenzaron a sentir un fuerte olor a quemado. Fue en ese momento cuando el policía recordó que había dejado su pistola 9 mm. Atinó a sacarla con un trapo y meterla en el freezer, pero ya era tarde. 

Desesperado, el policía llamó al 911, denunció lo que había pasado y pidió directivas. El personal de la Inspección General de Seguridad de Mendoza secuestró el arma y los cargadores.

(Fuente: Minuto Uno)