Tal como pasó en San Juan, aunque en la provincia sólo quedó en un intento. Sacando provecho de los cortes de luz por la ola de calor, dos hombres se hicieron pasar por trabajadores de una empresa de electricidad y le desvalijaron la casa a una jubilada.

El dramático episodio ocurrió este último martes, a unos pocos metros de la estación de trenes de La Plata. Hasta allí llegaron los dos delincuentes, bajo la lluvia que azotó a gran parte de Buenos Aires.

‘Señora, ¿tiene luz?’, gritaron los delincuentes desde el lado de afuera de la casa. Unos minutos fueron suficientes para que convencieran a la jubilada de que abra la puerta de su casa con la excusa de que le iban a revisar si había luz en su domicilio. Cuando la víctima abrió la puerta, la empujaron hacia adentro y comenzó un verdadero infierno para la mujer de 70 años.

Los ladrones la inmovilizaron y golpearon en varias oportunidades para que no gritara pidiendo ayuda. La mujer estuvo retenida en una habitación con uno de los falsos operarios, mientras que el otro recorrió todo el lugar y revolvió todos los cajones de la casa para llevarle alhajas de oro y una importante suma de dinero.

Ambos malvivientes escaparon caminando por la puerta principal de la casa y sin despertar sospechas de los vecinos de la zona, que asistieron a la mujer cuando logró salir de la habitación y pedir ayuda.