El conductor del trágico accidente ocurrido el pasado domingo en la Ruta Interlagos no declaró ante la Justicia, argumentando que "no recuerda mucho de lo que pasó". Este miércoles 23 de octubre, se llevó a cabo la audiencia de formalización del caso, donde se reveló que el test de alcoholemia realizado a los cinco ocupantes del vehículo arrojó resultados por encima del límite permitido, incluido el conductor, quien presentó un nivel de alcohol en sangre de 1.35 gramos por litro, casi el triple del máximo permitido de 0.5.

El siniestro, que resultó en la muerte de dos jóvenes, ocurrió cuando un Volkswagen Golf Trend, conducido por una persona de apellido Sández, perdió el control y volcó mientras circulaba por la Ruta 12, volviendo del Dique Punta Negra. El vehículo llevaba a cinco personas a bordo —cuatro hombres y una mujer— quienes fueron despedidos del auto tras el vuelco, cayendo a la banquina. Los servicios de emergencia confirmaron la muerte de dos ocupantes, mientras que los demás resultaron gravemente heridos.

En la audiencia, el fiscal del caso mencionó que Sández superaba el límite de alcohol permitido al momento del siniestro, lo que podría agravar su situación legal. Aunque la calificación inicial del delito es homicidio culposo, los agravantes de haber causado la muerte de dos personas y conducir en estado de ebriedad podrían llevar a una condena de prisión efectiva. Según el Código Penal, estos agravantes elevan la pena mínima por encima de los tres años, lo que imposibilitaría el cumplimiento condicional de la sentencia.

El conductor fue detenido preventivamente, pero se le otorgó arresto domiciliario por 30 días mientras se realizan las investigaciones pertinentes. Este plazo servirá para que el Ministerio Público Fiscal avance en la recolección de pruebas y testimonios, así como para evitar que Sández o sus familiares interfieran en el proceso judicial, ya que hay dos testigos clave que aún permanecen en estado delicado.

Aunque la defensa de Sández optó por no permitir que declarara en esta instancia, podría plantearse la posibilidad de un juicio abreviado, donde el acusado admitiera su culpabilidad a cambio de una reducción de la pena. Esta opción sería evaluada en función de las pruebas y testimonios que se obtengan en los próximos días. Sin embargo, con los agravantes presentes en este caso, incluso con un juicio abreviado, el conductor enfrenta la posibilidad de una pena de prisión efectiva.