Un insólito hecho sucedió en la ciudad de Navarra, en España. Un grupo de jóvenes se juntaron a jugar al fútbol clandestinamente. Pero eso no fue todo, los equipos estaban conformados por 'contagiados', quienes iban a disputar un partido contra 'no contagiados'.

El Hecho se produjo en un populoso barrio de Pamplona, donde la convocatoria se realizó vía redes sociales. A pesar de la polémica, el partido tenía un fin específico: lo recaudado con la venta de entradas iba a ser destinado a favor de enfermos por coronavirus.

Sin embargo, el evento fue desbaratado antes de arrancar ya que intervino el Grupo Delitos Informáticos del Área de Investigación Criminal de la Policía Foral de Navarra.

El único detenido fue un joven de 23 años, residente de Pamplona, quien está acusado de incurrir al delito contra la salud pública. Además, deberá abonar una multa de 3.000 euros.

Por si fuera poco, este mismo joven adujo que ya había organizado una fiesta, hace tiempo atrás, en el Lago Mendillorri. A esta, habían acudido cientos de invitados.