La Unión Europea (UE) busca recaudar 7.500 millones de euros con el fin de subvensionar diagnósticos, tratamientos y el desarrollo de una vacuna contra el virus.

Esta iniciativa fue a raíz de una petición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para facilitar el acceso rápido y equitativo a los tratamientos y a la posible vacuna. Por caso, el objetivo no es sólo lograr la vacuna, sino que la misma pueda llegar a todos de manera segura y por igual.

Este monto total de dinero será recaudado a través de donaciones otorgadas por países, instituciones financieras, artistas, filántropos, organizaciones internacionales y líderes empresariales. Convertido a dólares, la cifra pasaría a 8.000 millones. De ese número, 1.250 millones serían repartidos a los países vulnerables; 2.000 millones para la investigación y el desarrollo de vacunas; 1.000 millones para facilitar el suministro. Lo restante, para almacenar equipamiento, financiar métodos de diagnóstico y el desarrollo y suministro de medicamentos.

En particular, las donaciones se dirigirán a la Coalición para la Promoción de Innovaciones en pro de la Preparación ante Epidemias (CEPI) y la Alianza Mundial para Vacunas e Inmunización (GAVI). La Comisión también precisó además que el dinero recaudado no será solo para los países que realicen donaciones el lunes.

En un artículo conjunto publicado hoy en varios diarios europeos, la presidenta de la CE, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel; la canciller alemana, Angela Merkel; el presidente francés, Emmanuel Macron; el primer ministro italiano, Giuseppe Conte; y la primera ministra noruega, Erna Solberg, reconocen que la carrera "será larga" y dicen estar "decididos a trabajar juntos, con todos aquellos que comparten nuestro compromiso con la cooperación internacional".

"Los fondos que recaudemos impulsarán una cooperación global sin precedentes entre científicos y reguladores, industria y gobiernos, organizaciones internacionales, fundaciones y profesionales de la sanidad", dicen. De igual modo, insisten en su compromiso de que la futura vacuna contra el coronavirus esté disponible y sea "accesible y asequible para todos".

"Si podemos desarrollar una vacuna producida por el mundo, para todo el mundo, será un bien público mundial único del siglo XXI", destacan, y también dan su apoyo a la OMS, criticada por el presidente estadounidense, Donald Trump.