El grupo terrorista Estado Islámico capturó ayer a hasta 3000 desplazados iraquíes que huían de pequeños pueblos en el distrito de Hawiga (gobernación de Kirkuk) a causa de la violencia y mató a al menos doce, informó la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) citando a fuentes locales. "Esta mañana recibimos reportes de que el Estado Islámico capturó el 4 agosto a hasta 3000 desplazados" en la citada zona cuando "intentaban huir a la ciudad de Kirkuk", precisó el vocero del organismo en Ginebra, William Spindler. Al parecer, los desplazados habían huido de los fuertes combates en sus zonas residenciales en la provincia de Kirkuk y buscaban refugio en la ciudad homónima, señaló remitiéndose a informaciones sobre el terreno.

"Podemos confirmarlo", agregó, tras precisar que se trata de informaciones recogidas directamente por el Acnur, sea de las autoridades locales o de los mismos desplazados. Según la Acnur, un total de casi 3,4 millones de personas han sido desplazadas de sus hogares en Irak desde enero de 2014 a causa de los enfrentamientos y unos 220.000 se encuentran refugiados en otros países. Kirkuk es el centro de la industria petrolera iraquí. La zona al sur y oeste de la ciudad se encuentra desde junio de 2014 bajo control de la milicia terrorista EI, según los activistas. Hace dos semanas las fuerzas de seguridad iraquíes empezaron a cercar la zona y atacar al grupo jihadista.

La milicia terrorista secuestra continuamente a desplazados y ciudadanos de Irak y Siria. En el verano (boreal) de 2014 entraron en la ciudad de Sinjar forzando a huida de miles de personas, entre ellos de la minoría religiosa de los yazidíes. Más de 7000 mujeres y niños fueron secuestrados tras la masacre. También la minoría cristiana es continua víctima de secuestros por parte de los terroristas. Además de minorías religiosas, el EI persigue a civiles o determinados grupos profesionales a miles. Mientras por algunos pide rescates económicos, otros desaparecen sin dejar rastro, entre ellos periodistas, médicos, policías o abogados, con el objetivo de destruir cualquier vestigio del Estado anterior. Acnur denunció la falta de recursos financieros para entregar ayuda humanitaria a la población afectada. De los 584 millones de dólares que la organización había solicitado para este año con el fin de asistir a los refugiados y desplazados internos en Irak, solo ha recibido hasta ahora un 37 por ciento.