En Rusia, organizaron una fiesta polémica en la que se presume se tuvo tintes discriminatorios. El anuncio del evento que reuniría a expatriados en Sri Lanka especificaba un código de vestimenta blanco, pero también incluía una línea que decía "Control de rostros: blanco", lo que fue interpretado por mucha gente como que el evento estaba abierto solo a personas de tez clara. Luego de las repercusiones, uno de los organizadores dijo que el evento fue "una mala idea", agregando que estaba destinado a reunir a expatriados.

Desde que se emitió el anuncio, se generaron repercusiones en redes, con muchos comentarios denominando el hecho bajo los calificativos: "repugnante" y "racista". La fiesta, aparentemente organizada por miembros de la comunidad rusa, estaba programada para el sábado pasado pero fue finalmente suspendida.

De acuerdo a medios internacionales, tras el repudio de la gente uno de los organizadores rompió el silencio. Por medio de un posteo de Instagram dijo que no había "malicia ni racismo" en la planificación del evento. "Queríamos conocer a expatriados que han estado viviendo aquí durante mucho tiempo y aman a Sri Lanka. El equipo me apoyó y se tomó una decisión conjunta para organizar rápidamente una fiesta", dijo, sumó a sus dichos que tuvo que abandonar el país después de recibir una avalancha de abusos y amenazas.

"No esperaba que este fuera un momento tan sensible para una gran cantidad de personas. Admito que fue una mala idea y entiendo que lo creamos nosotros mismos por nuestra estupidez. Me disculpo profundamente con todos aquellos cuyos sentimientos fueron heridos", dijo el organizador.

El evento estaba programado para llevarse a cabo en el Salón Sarayka en la ciudad costera sureña de Unawatuna. El lugar luego publicó un comunicado diciendo que la fiesta había sido cancelada, agregando que su equipo de personal "no realizó una verificación lo suficientemente exhaustiva" y ha "roto lazos" con los organizadores del evento. "Nunca hemos apoyado y nunca apoyaremos diversas declaraciones u organizaciones racistas", informaron a la prensa.

Por su parte, la Embajada Rusa en Colombo emitió un comunicado diciendo que "condena enérgicamente todas las formas de discriminación racial y nacionalismo" e instó a los ciudadanos que residen en la isla a seguir sus leyes y respetar las costumbres locales.

Con información de Perfil.