Parece que Italia comienza a aplanar la curva del coronavirus. Este domingo, la península, registró 260 muertes por COVID-19, la cifra más baja de fallecimientos diarios de las últimas seis semanas. Los muertos fueron 155 menos que ayer y el número total asciende a 26.644 personas que perdieron la vida a causa de la pandemia mundial, según señalaron la autoridades sanitarias de este país.

Además, han contabilizado 2.324 nuevos contagios, lo que refuerza la idea de que el país europeo sigue controlando la curva de trasmisión del virus, y sigue reduciéndose el número de hospitalizados y de ingresados en unidades de cuidados intensivos

El número total de contagios desde que se inició la emergencia en el país el 21 de febrero, contando enfermos actuales, fallecidos y curados, asciende a 197.675, con un incremento de 2.324 respecto al sábado.

Las personas actualmente enfermas son 106.103, lo que significa que en las últimas horas han aumentado en 256 los nuevos positivos, y de ellas el 78 % se encuentra en sus casas sin síntomas o con síntomas leves.

Hay además 1.808 nuevos pacientes curados y se ha reducido el número de hospitalizados y de ingresados en unidades de cuidados intensivos (estos últimos son 93 menos desde el sábado, otro dato en constante disminución).

El Gobierno italiano informó este domingo que la mayoría de las empresas, la manufactura y la construcción reanudarán su actividad desde el próximo 4 de mayo, cuando el país inicie su desconfinamiento, pero que los ciudadanos tendrán que esperar un poco más hasta tener plena libertad de movimiento.