“Brenda era una chica muy buena, muy amable. Jamás pensé tener esta noticia de ella. No puedo creer que le haya pasado esto. N a él ni a ella”, dijo Cándido Alberto Flores, el papá de la joven asesinada este viernes en Media Agua.

En medio del dolor y la conmoción por el sangriento hecho, el hombre brindó su testimonio ante Canal 13. “Él era muy bueno, nunca se demostró ser una persona violenta. Siempre fue muy tranquilo. A veces tenían pequeños problemas, pero él no demostró ser violento ni nada. No entiendo por qué paso esto”, dijo Flores sobre Marcelo Vílchez, el presunto femicida de su hija que luego se quietó la vida.

El papá, reveló que recibió la noticia por parte de la hermana de Vílchez, quien le llamó llorando y le informó que había encontrado muertos a ambos en el interior de la vivienda del hombre en el barrio Patiño. “Yo estaba en mi casa en Los Berros creyendo que era una joda todo. No podía creer que era cierto hasta que llegue acá”, reveló el hombre.

También, contó que su nieta, la hija que tenían en común Brenda y Vílchez, le contó que su mamá y su papá estaban lastimados.   De esta manera, confirmó que la pequeña estaba en la casa cuando sucedió el hecho y fue testigo de todo lo que pasó entre sus padres.

Luego, el hombre comentó cómo era la relación que tenía la pareja. “Ella estaba en mi casa porque mandaba a las nenas a la escuela en Divisadero. Brenda se iba a todas las semanas a mi casa y a veces los fines de semana él iba a buscarla y se venían para su casa”, dijo Flores.

El papá comentó que Brenda se había quedado estos días en la casa de Flores porque él la había ido a buscar para que cuidara a una de sus hermanas que estaba internada en el hospital de Media Agua. Este viernes, a primeras horas de la mañana volvieron a la vivienda de Vílchez donde se desató el trágico hecho.

Brenda Flores, tenía 25 años y fue encontrada muerta sobre un charco de sangre este viernes en la vivienda de su pareja en el barrio Patiño de Media Agua. En su cuerpo, los peritos encontraron más de 15 heridas de arma blanca, por lo que presumen que fue víctima de un feroz ataque a cuchillazos por parte del hombre.

Por su parte, Marcelo Vílchez, también fue hallado sin vida. El hombre se suicidó luego de asesinar a su pareja, según revelaron las primeras pericias de la investigación.

La pareja tenía en común una hija de 3 años que estaba en la casa al momento del sangriento episodio. La nena, aparentemente fue testigo de todo lo que ocurrió entre sus padres y fue quien dio a viso a su tía sobre lo que había pasado, según informó el fiscal del caso, Adrián Riveros. Brenda tenia además otras dos hijas, fruto de una relación anterior.

Por decisión de la Justicia y la Dirección de Niñez, las 3 niñas quedaron al cuidado del padre de Brenda.

Mientras tanto, la Justicia continua con la investigación.