Sobre el mediodía de este viernes 20 de octubre se vivió una situación sumamente tensa y escandalosa en pleno Capital. Todo ocurrió cuando una mujer que se encontraba con sus cuatro hijos comenzó a enfrentarse verbalmente con policías. La situación fue escalando hasta que se generó un violento forcejeo con los uniformados para llevarse detenida a esta persona.

Todo ocurrió sobre calle General Acha entre Avenida Libertador General San Martín y Laprida. Allí una mujer era acusada por uniformados de haber roto una máquina que se encontraba en la vía pública, ella aseguraba que esto no había ocurrido y que no podían llevarla detenida por esta situación.

'No podés patear lo que se te de la gana, has pateado la máquina', expresó la uniformada.  'Yo venía caminando con mis hijos, se me perdió uno de los chicos, resulta que le había dado plata y él la metió en una máquina. La máquina le sacó la plata y no le ha dado nada, yo me enojé y la golpee. No se ha roto la máquina. No he roto nada como para que venga un policía a perseguirme cuando estoy con los niños y me diga que me va a llevar. No es así. Encima me acerqué a él y le dije que me disculpaba, le expliqué lo que pasó, me quería llevar igual', replicó la mujer.

La tensión fue escalando hasta que de forma sumamente desprolija los uniformados esposaron a la mujer, teniendo que tirarla al suelo dentro de un local gastronómico para poder aprehenderla mientras sus hijos menores trataban de evitarlo.

Luego, en medio de gritos y golpes de puño por parte de un efectivo a un niño de 8 años que estaba con la mujer detenida, se llevaron en un móvil a esta persona. Sus cuatro pequeños menores de edad quedaron solos en la vía pública, lamentándose al haber sido separados de su madre.