Un impactante robo se concretó en horas de la noche del pasado martes 10 de agosto en la provincia de San Juan. En el departamento Rawson una familia fue engañada por una pareja de delincuentes que se hicieron pasar por policías. Estos malvivientes se robaron una suma de 1.300.000 pesos argentinos en efectivo.

Todo ocurrió alrededor de las 20:00 de la mencionada jornada en una vivienda situada sobre calle O'Higgins. En este sector del barrio Hualilán reside un hombre de 63 años de edad llamado José Martín. En ese momento el sanjuanino estaba acompañado por su mujer de 64 años, su hija Yamila Martín de 26 años y su nieto de 5 años.

Ellos se encontraban contando una gran suma de dinero en efectivo ya que iban a realizar la compra de un auto modelo Renault Symbol. Martín le contó al medio Tiempo de San Juan que el martes por la mañana se había reunido con el vendedor, a quien había contactado por Facebook. Ambos habían acordado efectuar la transacción este miércoles, cosa que evidentemente no sucedió.

Minutos después de que terminaran de chequear que tenían el dinero en efectivo necesario alguien tocó el timbre. En ese momento fue el dueño de casa el que salió a ver de quien se trataba. Allí vio a dos hombre con uniforme de la Policía de San Juan. Tenían el escudo y demás detalles que le dieron seguridad a José para atenderlos.

Una vez que abrió la puerta estos sujetos le dijeron que "querían hacerle unas preguntas". El hombre se sintió confiado y efectivamente los dejó entrar. Fue en ese preciso instante en que todo se desmadró ya que ellos tomaron un arma de fuego y les dijeron que se trataba de un asalto.

Acto seguido tiraron al piso al hombre que los recibió e intentaron hacer lo mismo con los demás pero Yamila se dio cuenta que era una pistola de juguete. Debido a esto decidió enfrentar a quien la portaba pero el otro malviviente la agarró de los pelos y la tiró contra el piso violentamente.

Después la propia joven les dijo donde estaba el dinero para que se lo llevaran y los dejaran en paz. Los billetes estaban arriba de una mesa, a simple vista, por lo que habían estado contándolos. Gracias a ello los intrusos metieron todos los fajos a una bolsa y salieron corriendo del lugar de los hechos.

Frente a este escenario, movilizada por la bronca y la impotencia la sanjuanina salió a perseguirlos. Sin embargo no pudo atrapar a ninguno ya que vio como se subieron a un auto que los estaba esperando para escapar a gran velocidad. Actualmente el episodio esta siendo investigado por efectivos de la Seccional 25ta, quienes tienen su sede a dos cuadras de la casa afectada. La hipótesis más fuerte es que alguien sabía que iban a realizar la compra del auto y los entregó a los delincuentes.