Todo sucedió con el llamado de un fletero que fue desde San Juan a entregar unos elementos a una casa en la localidad de Chañar, en la provincia de La Rioja, a 40 kilómetros de Chamical. Y se volvió con una imagen que lo dejó perplejo. Al punto de recién denunciar lo que visualizó, una vez que estuvo en tierra sanjuanina. Lo que vio el fletero fue el féretro de un niño, otro cuerpo en forma de reposo y un olor nauseabundo.

El fletero, oriundo del departamento Rawson, fue contratado para llevar un freezer y otros elementos a la localidad riojana de Chañar. Cuando ingresó al domicilio, junto con la persona que lo contrató, se topó con un olor nauseabundo y al visualizar lo que había en el domicilio, observó el féretro de un niño y le cuerpo de una persona acostada a un lado, lo que él cree que sería una persona fallecida.

Lo curioso es que descargó e ingresó los elementos en la vivienda junto a la persona que lo contrató, también del departamento de Rawson, quien sería sobrino de la mujer sanjuanina que habita la casa en la que dejaron las cosas.

Viendo que la persona que lo llamó para realizar el trabajo no se inmutó por lo sucedido, el fletero emprendió regreso junto a él. Fue entonces que cuando llegó a San Juan y dejó al hombre en el domicilio, pudo llamar a la Policía de La Rioja para denunciar lo que vio, contó el juez Alejandro Aquiles, juez de instrucción subrogante en la tercera circunscripción de La Rioja, en Radio Sarmiento.

El magistrado también mencionó que cuando ordenó el allanamiento en el domicilio, los policías al ingresar encontraron tres perros muertos en un estado avanzado de descomposición. Se presume que la mujer los tenía en un freezer y los sacó de allí al ver llegar a los efectivos policiales. Dentro de las presunciones, se cree que el aparato refrigerante no estaba funcionando, por el olor nauseabundo que había en su interior.

Los efectivos encontraron el féretro de un niño, que sería de vieja data, en estado de momificación. Ahora lo que intentan determinar es si pertenece a una tumba profanada en San Juan o en La Rioja.

Según antecedentes, la mujer tendría problemas mentales y en ocasiones la Policía mencionó que habría señalado que en el pueblo habían clones y el cuerpo del menor fallecido sería para ese fin.

Según los primeros datos tras la revisión forense, el cuerpo presenta una autopsia de vieja data, por lo que buscan determinar qué pasó y cómo llegó el menor a estar allí, aclaró el juez Aquiles.

La mujer sanjuanina, que tendría entre 55 y 65 años, se encontraba escondida en unos yuyos que había en la parte posterior del domicilio al llegar los funcionarios policiales y judiciales.

Por ahora se encuentra internada, recibiendo asistencia médica la mujer, mientras el juez libró un exhorto a la Justicia sanjuanina para proceder con declaraciones y posibles detenciones del sobrino, el fletero y determinar si el féretro y cuerpo del niño encontrado corresponden a una tumba profanada en San Juan.

Por el estado avanzado de años de fallecimiento, se hizo imposible determinar si el cuerpo encontrado corresponde al niño que en fotos exhibió la mujer.

La mujer, junto a una hermana que ya no vive con ella y que volvió a San Juan, dice el juez que intentaron profanar la tumba en la que se encuentra sepultado quien fuera el marido de la mujer en cuestión.

Muchas dudas y elementos por averiguar es lo que tiene este juez del juzgado de Chamical, que halló una historia macabra con una sanjuanina en el medio de todo.