Una familia de la provincia de Buenos Aires vivió un infierno durante la madrugada del pasado miércoles 19 de enero. Esto se debe a que un grupo de delincuentes logró colarse en su vivienda que se encuentra en un country. Allí los malvivientes fueron arrancándole una a una las uñas a una mujer para que les entregara un dinero que nunca tuvo en su poder.

Todo ocurrió alrededor de las 01:00 en el interior del barrio privado San Eliseo, ubicado dentro de la ciudad bonaerense de San Vicente. Allí un total de cinco hombre ingresaron encapuchados y con armas de fuego a una de las viviendas cuando la familia que vive en el lugar estaba durmiendo.

En el lugar viven un empresario gastronómico, su esposa, sus dos hijas gemelas que son menores de edad y la empleada doméstica que fue la primera en ser reducida. Estos intrusos comenzaron a exigirle a la pareja que les entregaran una gran suma de dinero que los afectados aseguraban no tener.

Luego de varios minutos de esa discusión que no iba hacia ningún lugar los delincuentes se pusieron aún más violentos y empezaron a maltratarlos a todos. Al ver que nada cambiaba decidieron tomar a la mujer, maniatarla y comenzar a arrancarle las uñas con un alicate que había en el lugar.

En total le quitaron seis uñas de un tirón cada uno, produciéndole un inmenso dolor a la víctima. Sin embargo realmente los afectados no tenían el efectivo que los agresores estaban buscando así que la situación seguía igual. Pensando que los propietarios seguían mintiendo, los intrusos amenazaron con cortarle la lengua a una de las niñas.

“Amenazaron con cortarle la lengua a una de mis hijas gemelas. Ahí nos enajenamos con mi esposa. Pensamos: ‘Estamos muertos’. Yo tiré al piso a uno y ella mordió a otro, como eran cinco nos superaban en número y volvieron a pegarnos. Le dieron una patada voladora a mi esposa e intentaron atarnos, pero la situación ya se les había ido de las manos y optaron por escapar”, explicó el empresario al medio TN.

En ese momento el hombre dio aviso a la custodia del barrio, quienes contactaron al 911 para que fueran al lugar. Ante esta denuncia un grupo de efectivos policiales llevó a cabo un operativo cerrojo en la zona pero no tuvieron éxito. Por el momento los torturadores no han sido atrapados.

Finalmente cabe destacar que la mujer herido fue trasladada hasta el sanatorio Los Arcos. Allí fue atendida no sólo por las heridas en sus manos sino también por una gran serie de golpes que sufrió en su rostro. "La golpearon tanto que la cara parece una máscara de lo hinchada que está”, explicó su marido.