En la reunión del pasado lunes en Buenos Aires, Javier Milei se encargó de despejar algunas dudas que tenían los referentes de todo el país. Incluído el sanjuanino José Peluc. Con la hoja de ruta ratificada, adelantaron los tiempos. Si gana el ballotage, en 10 días comenzará la transición. Los operadores se pusieron en acción para construir gobernabilidad.

En ese contexto se inscribió la invitación pública que hizo el senador electo Bruno Olivera esta semana en Paren las Rotativas (martes a las 21 por Canal 13). El legislador libertario dijo que está dispuesto a sentarse con el gobernador electo Marcelo Orrego, para acercar posiciones. Su actitud dialoguista abrió una puerta que hasta ahora estaba cerrada.

Como el resto de los gobernadores de Juntos por el Cambio, Orrego decidió mantenerse neutral. Pero en un mes tendrá que empezar a gestionar y el vínculo con la Casa Rosada siempre será bienvenido, gane quien gane. Tal vez Olivera pueda tender esa línea hasta ahora inactiva.

Mientras tanto, Peluc apeló a su historia y tuvo algunos contactos con el massismo. No fue una charla conspirativa ni nada que pueda emparentarse con la traición. Por el contrario, fue una acción política para generar el clima de convivencia parlamentaria que necesitará Milei en caso de recibir los atributos de mando el 10 de diciembre.

Dos factores confluyen en Peluc para jugar esa delicada estrategia. El primero es su cercanía con Milei. Este miércoles en Banda Ancha el diputado electo fue enfático y reiterativo: se considera a sí mismo como integrante de la mesa chica libertaria a nivel nacional. Ocupará un lugar destacado, llegado el momento de gobernar.

El segundo factor es que Peluc tiene una larga, larga historia de militancia de raigambre peronista. Se formó bajo la tutela de José Ubaldo Montaño, acompañó a Roberto Basualdo y finalmente fundó su propio partido, ADN. Con Massa se conocen desde hace tiempo. Este miércoles en Banda Ancha tuvo palabras de reconocimiento hacia el candidato presidencial de Unión por la Patria.

'Massa es rápido, es inteligente. Sabe hacer lo que hay que hacer en la política para llegar. No sé si para gobernar', dijo el diputado libertario. Aquello de 'la casta' quedó, evidentemente, para el archivo del Tik-tok nomás.

Milei creció montado en la defraudación social. Se hizo fuerte a partir del descreimiento en la política clásica. Cada punto de inflación, cada corrida cambiaria, fue pura ganancia para la construcción de su candidatura. Los gritos, la motosierra y la promesa de un país dolarizado, todo funcionó para colocarlo en posición expectante.

Pero, teorema de Baglini mediante, a medida que se se fue aproximando al poder tuvo que moderar sus declaraciones públicas. Y debió ceder a 'la casta' de la que tanto había renegado. Lo hizo con el gastronómico Luis Barrionuevo, ícono del sindicalismo más rancio del país. Luego sumó a Mauricio Macri. El expresidente se puso al hombro la campaña como no lo hizo con Patricia Bullrich. El fundador del PRO sentenció a Juntos por el Cambio, identificado a fondo con la propuesta de extrema derecha.

La incorporación de Macri provocó un remezón interno en La Libertad Avanza. Fundamentalmente cuando trascendieron múltiples versiones sobre la letra fina del acuerdo. ¿Quedó YPF en el medio como prenda de cambio? ¿Habrá alguna alteración en el plan económico original? ¿Federico Sturzenegger irá al Ministerio de Hacienda? Milei tuvo que sentar a los más cercanos para transmitir tranquilidad.

Aunque resulte difícil de acreditar, Milei escuchó los planteos internos y, sin ofuscarse, bajó línea. Así lo relató Peluc, uno de los selectos invitados. 'Necesitábamos mostrar que estamos más unidos que nunca. Estamos súper unidos', reiteró el sanjuanino.

Reconoció, no obastante, que la proximidad con Macri generó dudas. Cada uno de los libertarios tiene 'situaciones' en su respectiva provincia. Peleas de largo arrastre con el macrismo local. Si Milei les ordenaba fusionarse en todo el territorio, iba a provocarles un problema serio. Pero no se los pidió.

'Queríamos saber de boca de Javier hasta dónde llegaba ese acuerdo', explicó Peluc. Según el candidato presidencial, el pacto con Macri se limitará al acto eleccionario. De ahí en adelante habrá total independencia del expresidente. ¿Esto significa que no habrá ningún funcionario salido de Juntos por el Cambio? No. Puede haberlo. Y eso también se los dejó en claro Milei.

Peluc no es nuevo en política y conoce las reglas. Es consciente de que necesitarán generar gobernabilidad en caso de que les toque la victoria el 19 de noviembre. Pero la gobernabilidad queda peligrosamente cerca de la dependencia política. 'Extorsión', dijo el diputado nacional.

Uno de los temores libertarios es quedar a expensas del grupo de gobernadores de Juntos por el Cambio para poder reunir número en el Congreso. Por eso las conversaciones se están diversificando también hacia el peronismo. Si a Unión por la Patria le tocara la derrota, Peluc estará esperando a los heridos para darles cobijo.

Las encuestas difundidas esta semana siguen proyectando un final cabeza a cabeza, digno de todo ballotage. Para los libertarios, el triunfo es muy tangible. Tanto que adelantaron los tiempos. Porque los tiempos serán brevísimos. Para gobernar, primero hay que ganar, es cierto. Pero para gobernar también hay que construir gobernabilidad. Y eso no se logra en dos semanas. 


JAQUE MATE