El grooming es un delito en Argentina desde el 2013, tiene una pena de prisión de cumplimento condicional (el culpable no va preso) de entre 6 meses a 4 años, según rige el Código Penal. Es un flagelo que sufren miles de niños y adolescentes del país, y que en muchos casos no salen a luz a tiempo, o no son detectados a tiempo por los padres.

Atento a esta gran problemática que viven y sufren los chicos y chicas de la Argentina, Tarde Trece entrevistó al fundador de Grooming Argentina, Hernan Navarro, quien aseguró que en el país ‘a 1 de cada 4 chicos y chicas en la Argentina, de entre 9 y 17 años, les requieren contenido sexual’

El grooming es el acoso y abuso sexual online. Estas prácticas delictivas implican a un adulto que se pone en contacto con un niño o niña o adolescente, para con habilidad ganarse su confianza, para luego involucrarse en una actividad sexual. Por lo que, tiene diferentes niveles de interacción y peligro, como hablar de sexo y conseguir material íntimo, hasta llegar a concretar un encuentro sexual.

Estos casos se producen cuando el acosador establece un vínculo de confianza a través de un proceso que puede durar unos minutos o varios días, e incluso meses. Navarro, quien desde hacen varios años batalla contra este flagelo desde esta ONG, contó que la pedofilia encontró un vehículo de contacto y de proximidad en las redes sociales, y esto se acrecentó durante la pandemia.

En el país, los más expuestos son los chicos y chicas desde los 9 a los 13 años. Las plataformas de juegos inclinaron una gran cantidad de casos en los que las víctimas fueron varones. Los acosadores se valen de estos espacios para primero ganarse la confianza de la víctima y después migrar a WhatsApp e Instagram, principalmente.

'El acoso puede durar minutos o puede extenderse por años, según marcó Navarro. En pandemia sucedió que se generó un escenario donde ‘el cazador cazaba en un zoológico’.

Navarro alertó a padres y otros adultos de que es primordial y urgente que la ley se reformule, para endurecer penas, que sean efectivas y para que regule otros marcos que quedaron afuera como la gravedad profunda que puede producir un acosador o pedófilo en una víctima con discapacidad.

Además, el profesional aseguró que al contrario de lo que se piensa, las nuevas generaciones no son nativos digitales, porque no tienen todos los datos, todas las herramientas para moverse por internet y detectar cuando están frente a un inminente peligro. El perfil del acosador, abusador, violador o pedófilo varia, pero principalmente se destaca la capacidad que tienen para mostrarse en un principio amistosos y a la vez seductores.

'Los chicos ni siquiera se imaginan de quien o de que se tienen que cuidar en internet'

'La emancipación virtual es difícil. A los 9 años cuando les regalan un teléfono propio a un niño o niña, y no saben cómo cruzar la calle es un peligro. Los chicos y chicas no saben cuidarse a esa edad’, sostuvo el fundador de Grooming Argentina.

Para Navarro además de reformular la ley existente o crear una nueva, se debe empezar a aplicar la Ley de Educación Sexual (ESI) en las escuelas del país. ‘Los chicos y chicas conocen por la pornografía y no por la educación sexual que debería ser impartida en las escuelas, pero hay un mundo adulto que tiene una visión sesgada de internet, de la situación y de las graves secuelas que puede dejar en las víctimas el grooming’, señaló.

Otro de los puntos en los que se detuvo Navarro, fue en que el término virtual debería abolirse para hablar de estos casos, y que para ello la sociedad, la Justicia, los medios de comunicación y otros actores deben ponerse en campaña para erradicar esta palabra a la hora de hablar en el que el impacto es real. ‘Internet no suaviza la violencia, por lo que debemos hablar de ecosistema digital’, expresó.

El profesional aseguró que las familias, y principalmente los padres deben de hablar con sus hijos de estos temas. En esa línea, aconsejó preguntarle a sus hijos e hijas ¿cómo te fue en internet hoy?, así como también indagar en que vio, con quien conversó. Si una de las respuestas es el silencio o la incomodidad es motivo de alarma.

Navarro señaló que el grooming es difícil de combatirlo y de prevenirlo. Sucede que los delincuentes van reversionado su modus operandi, casi al ritmo de los cambios tecnológicos, por lo cual el panorama es siempre cambiante.

‘Hay que endurecer las penas, tratarlo de forma urgente, que tenga en cuenta las personas con discapacidad porque el daño es doble, por el factor emocional’, exigió el fundador de Grooming Argentina.

Navarro quiere llevar la ONG a otros países de Latinoamérica, y que en los países en donde no es considerado un delito, como en Bolivia forzar a que lo sea. ‘Queremos ir a los parlamentos de Latinoamérica para que sea ley, para que comience a ser tomado en serio por las autoridades de los países’, aseguró.

Port último, Navarro precisó que ‘nadie puede evitar que un pedófilo le escriba a un niño. Lo que, si se puede evitar, es que sean víctimas, y las herramientas que tenemos son las con campañas de concientización, las políticas públicas y todas las acciones que concienticen sobre este flagelo, este peligro’.