El milagro de Mateo, el sanjuanino operado en el Garrahan
Tiene un año y medio, y sufre de una cardiopatía congénita. Estuvo durante 8 horas dentro del quirófano para superar el peor escenario. Su familia pide trabajo para afrontar los gastos de medicamentos.
Buenos Aires, Hospital Garrahan. En la sala de espera, Pablo Abrego y su pareja aguardan sentados, atentos, expectantes. No despegan la mirada de la puerta del quirófano, cuando llega un médico. El cirujano, entre lágrimas, anuncia: 'fue un milagro, lo de Mateo es pura fuerza'. Este es el escenario por el que tuvo que atravesar una familia de Chimbas, en la que el niño, de apenas un año y medio, debió ser intervenido quirúrgicamente en el reconocido nosocomio y está a salvo.
'Nos dijeron que era una cirugía muy compleja, que duraba entre 10 y 8 horas porque era a corazón abierto. Debieron hacerle tres cirugías, una en el pecho para sacar su corazoncito, hacerle un bypass y una pierna que no se estaba desarrollando bien. Decían que era muy difícil y nosotros estábamos asustados. Lloren de felicidad nos decía el cirujano', describió Abrego a Canal 13.
Es que el panorama era difícil incluso cuando Mateo estaba en gestación. A los 8 meses de embarazo, gracias a los chequeos de los programas de maternidad, detectaron la malformación en el pequeño. 'En ese entonces quisieron operarlo cuando nació, yo me opuse porque me dio mucho miedo pero esperamos dos meses y lo operaron, él tenía como un anillo y le bombeaba mucha sangre a los pulmones', señaló el papá, recordando aquellos días de desesperación.
Sin embargo, Mateo salió bien de aquella cirugía y todo hacía parecer que estaba estable. 'Nosotros teníamos pensado volver a operarlo porque nos lo recomendaron la primera vez. Nos empezamos a mover con los papeles y fue cuando el doctor nos dijo que no iba a aguantar con la patología compleja que tiene, que podía pasarle algo', comentó.
Fue entonces cuando comenzó todo un operativo para la familia. 'Nos comunicamos con la concejal Mirta Ormeño, ella nos contactó con Fabián Aballay, ministro de Desarrollo Humano, y él nos facilitó todo el camino para dar con el avión sanitario con el cual viajamos con Mateo', explicó.
Gracias a esta red que se generó alrededor del niño, hoy los papás descansan, tranquilos, aislados por protocolo pero sabiendo que el milagro se produjo. Lo que queda es mirar para adelante. 'Yo soy changarín de la feria, tengo 23 años. Vivimos en una casa muy precaria en Chimbas. Soy muy trabajador, le pido por favor a alguien que tenga un trabajo para mi, lo voy a agradecer con el corazón. Lo necesito para comprarle los remedios a Mateo', dijo.
Los que estén interesados en colaborar con esta familia sanjuanina, pueden hacerlo al teléfono de Pablo Abrego al 2646622340.