Daniel Torrent, es un baterista sanjuanino,  que hizo de Mallorca su hogar desde hace varios años. Su historia  no solo tiene condimentos de talento, sino también valentía y lucha por sus sueños. Él charló con Diario 13 sobre los motivos detrás de su partida de San Juan y cómo ha navegado por su nueva vida en España.

“Me fui de San Juan en el año 2000, justo antes del corralito. La situación económica y artística no eran buenas, y no veía un futuro claro”, confiesa Daniel. Con la nacionalidad española heredada de su familia, no dudó en tomar la decisión de mudarse a España. “Decidí venir a Mallorca, aquí en el Mediterráneo, porque realmente sentía que mi vida podía cambiar”, añadió. En la misma línea sumó: “No me arrepiento de haberlo hecho”.

El proceso de adaptación no fue fácil. “Lo que más me costó fue dejar atrás a mi familia y a mis amigos. Eso fue lo más difícil”, relató. Sin embargo, Daniel se sintió aliviado al encontrar similitudes culturales entre su hogar y su nuevo entorno: “La cultura aquí es bastante similar a la que tenemos en San Juan. La adaptación fue rápida; sólo tenía que conocer cómo funcionaban las cosas aquí”.

La vida como músico en España ha sido muy prometedora para Daniel. “Hay muchas oportunidades porque, al ser un país tan turístico, siempre hay espectáculos musicales. Solo tienes que pagar la entrada”, explicó. Con la llegada de millones de turistas cada año, la demanda de música en vivo es alta. “He estado en diferentes bandas y puedo ajustar mi estilo según lo que el mercado requiere”,  dijo el sanjuanino.

IN ROCK BAND - Promo Video

Desde que comenzó a tocar la batería a los 16 años, la música ha sido una constante en la vida de Daniel. “Siempre intento renovarme. Aquí formé una banda que tuvo mucho éxito y tocamos en importantes teatros y salas”, comentó.

 Su banda, Vandalis, fusionó rock con ópera, creando un estilo único que resuena con el público. Desde una edad temprana, Daniel estuvo rodeado de figuras que lo han inspirado. “Mis influencias tanto en lo familiar como en lo musical han sido fundamentales”, comentó. Su abuelo materno, Andrés Velasco, es una de sus mayores inspiraciones. “Desde el primer día, él ha sido un ídolo para mí. Aprendí muchísimo de él, y su enseñanza de vida ha dejado una huella profunda en mí”. También destacó la importancia de sus padres: “Ellos me enseñaron todo lo que sé en la vida. Su apoyo incondicional ha sido vital en mi desarrollo personal y artístico”.

En el ámbito musical, la historia de Daniel comenzó a los nueve años cuando descubrió el grupo Kiss. “Fue un shock, un momento que cambió todo. Desde que los vi, supe que quería ser músico”, recordó. Esta revelación no solo encendió su pasión por la música, sino que también lo llevó a explorar el mundo de la batería. Con el tiempo, y a medida que su técnica fue evolucionando, Daniel encontró en Scott Travis de Judas Priest una influencia clave. 

“Lo más loco que me ha pasado es llegar aquí y que reconozcan mi arte y talento”, comentó “Poder salir a tocar y que me reconozcan por mi nombre, que me reconozcan en la calle, es algo increíble. Significa que lo que hice en San Juan tiene un gran valor que se traslada a esta parte del mundo”. Para Daniel, este reconocimiento no solo valida su esfuerzo, sino que también resalta la calidad de su trabajo: “Era un producto bueno, tanto el de allí como el de aquí. Le puse muchas ganas y modernismo a lo que hago”. 

VANDALIS EN VIVO

Además de la validación de su talento, Daniel destacó la emoción de poder asistir a conciertos de bandas y artistas que siempre admiró.  A diferencia de San Juan, donde el acceso a grandes espectáculos suele requerir un viaje a Buenos Aires, en Mallorca tiene el privilegio de tener eventos musicales de alta calidad a la vuelta de la esquina.