El pasado sábado, Facundo Pasten recibió una descarga eléctrica de alta tensión, al salvar a un niño de una muerte segura. Ocurrió en el Lote Hogar N° 3 de la Bebida, donde el pequeño jugaba con un barrilete que se le atascó en unos cables de alta tensión e intentó desenredarlo.

Fue en ese momento cuando, Facundo, logró tomar la cuerda y sacar al niño que también sufrió graves heridas.

Este lunes, Antonio y Mabel, los padres Facundo Pasten, el hombre que salvo a un niño de morir electrocutado, hablaron con Canal 13 en el hospital Marcial Quiroga, donde se encuentra internado el muchacho con el 99% del cuerpo quemado.

“Tiene todos los órganos quemados. Está en estado vegetativo, coma inducido, con posibilidades muy pocas de vida. Hay que pedirle a Dios nada más”, dijo Antonio.

“Él había ido a ver a la pareja, supuestamente los niños han estado jugando y los ha estado mirando. Se le ha enganchado el volantín a uno de los niños o no sé si le estaba dando la corriente a un niño. Porque también está internado en el hospital un chico pero dicen que la descarga, ha dejado de día la zona. Parpadeaban las luces”, relató el padre del joven. Y agregó que “los médicos me dicen que mi hijo está cocinado por dentro. La corriente no ha salido para afuera. Se ha quemado todo”.

“El chico era amigo del niño de la pareja de mi hijo. Facundo ha visto que el chico estaba en peligro porque se estaba acercando a la alta corriente la cola del volantín y él ha corrido. Ahí es donde lo ha tocado al niño la corriente pero cuando él lo saca al niño se le viene toda la corriente a él. Él tomó la cuerda”, contó la mamá.

“El chico, de 10 años, también estaba quemado. Recibió parte de esa descarga. Ha perdido un oído el nene, tiene la parte derecha del cuerpo quemada. También está mal”, dijo el papá de Facundo. “No sabemos quién es el niño no los conocemos”, agregaron.

“Todos los días nos van a dar un parte médico. Anoche lo vimos un ratito nomas, no nos podemos acercar, no se puede mover”, comentó el padre.

Antonio Pasten, el papá del joven quemado, dijo que no tiene un empleo en blanco ni obra social. “Yo trabajo en la construcción, hago pozos negros. Changas. Facundo era mi mano derecha”, relató.

“Vamos a estar hasta que salga mi hijo. Toda la noche, todo el día, dormimos en el pasillo o el piso pero estamos acá con él. Nos vamos a quedar hasta que el salga. No me voy a mover hasta que tenga buenas noticias de Facundo”, dijo la mamá entre lágrimas.