Marisa Poblete lleva una vida dedicada a ayudar y cree que aun tiene mucho para dar
Marisa Poblete nació con una discapacidad que no le impidió convertirse en una referente de la lucha social. Cómo eran sus navidades y qué desea para esta festividad.
Marisa Poblete tiene 46 años y buena parte de su vida la dedicó a ser una referente social y trabajar por que se cumplan los derechos de los otros. La dirigente aceptó participar del Especial de Navidad de Canal 13, habló de su vida, su discapacidad y sobre su labor enfocada en la solidaridad.
Marisa contó que hace nació sin brazos por un trastorno genético y agregó que esto no fue un impedimento para formar una familia y tener dos hijas. También tuvo diferentes trabajos hasta que hace 11 años comenzó a trabajar en la oficina de Anses en Rawson. “Además de todas esta ocupaciones, esta mujer se dedica a "militar en lo social”, aseguró.
Poblete explicó que ella tiene cinco hermanos y aseguró que sus padres y hermanos nunca la trataron como a una persona en desventaja por su discapacidad.
“Estoy agradecida a mi familia, a mis padres que supieron sortear cosas que tiene la discapacidad, las barreras mentales de las personas que no están acostumbrados a lo diferente, les asusta, no lo entienden. Mis padres me criaron sin hacerme sentir que no tenia brazos, mi paso por la escuela mi paso fue normal natural”, explicó la mujer.
Al analizar si hubo avances con la inclusión de las personas con discapacidad, Marisa opinó que “el paradigma aun no se ha roto, hemos avanzado como sociedad pero la discapacidad sigue enfrentando barreras arquitectónicas y problemas con el tema de la accesibilidad”.
Ante la pregunta de cómo vivió las navidades en su vida, Marisa contó que para ella la “navidad es un motivo de celebración. ”Vengo de una familia numerosa, nos juntábamos para festejar, no lo tomo como algo comercial sino como algo más profundo porque se celebra el nacimiento de Jesús. Él también fue una persona que rompió barreras que había antes y después que el se vive de otra manera", destacó.
Un clásico de estos días es la consulta de qué desean las personas para esta navidad. Marisa contó que lo único que ella pide es tener salud para poder disfrutar las cosas importantes de la vida. “Tenemos trabajo agradecer disfrutar de las personas que queremos y a los que no nos quieren también hay que desearles cosas buenas”.
La mujer que contó que aun recuerda las navidades con todos los tíos y los primos, cuando que padre aún vivía, aseguró que desea que “ojalá a la Argentina le pasen buenas cosas, que la gente tenga un plato de comida en su mesa, que se lo pueda ganar, que pueda compartir con sus seres queridos y no estar preocupados”, pidió Poblete.
Para su futuro Poblete pidió poder “conservar un corazón noble, el dolor que siento por lo que veo”, aseguró Marisa quien agregó que esto es lo que sienten los dirigentes sociales. “Somo eso más sentimiento que otra cosa, nos duele lo que le pasa a los demás por eso seguimos”.
La dirigente reconoció que tras tantos años de trabajo en lo social, algunas veces siente que no llega a ninguna lado pero agregó las fuerzas se renuevan: “cuando vez una sonrisa de un niño que te dice gracias que se le empañan de brillo por una cosa simple”, cerró.