El dueño del taller, Raúl Fernández, llegó alrededor de las 16.00hs a su negocio, ubicado en Avenida Libertador San Martín 6185 este, y se encontró con la escena. El cuerpo de Alexis Guzmán yacía tirado junto a un vaso plástico rojo con una sustancia líquida en su interior.

Fernández llamó al 911 y minutos después llegó una ambulancia del 107, cuyo personal constató el fallecimiento de Guzmán. También se hicieron presentes efectivos policiales de la Delegación Especial y de Criminalística, así como funcionarios judiciales de la Fiscalía de Homicidios.

El médico legista examinó el cadáver y no observó fracturas ni lesiones corporales externas que pudieran explicar la causa de la muerte. Por ese motivo, el cuerpo fue trasladado a la morgue para realizarle la autopsia correspondiente.

Según el relato de los familiares de Guzmán, el joven había trabajado en el taller por la mañana y luego había almorzado con sus hermanos en su vivienda alrededor de las 13.30hs. Después de eso, regresó al taller, llevando un carrito. Un vecino declaró que lo vio ingresar al lugar cerca de las 14.15hs.

Todos los entrevistados coincidieron en que Guzmán era una persona que colaboraba con todos los vecinos, haciendo múltiples tareas, y que no tenía problemas con nadie. Sin embargo, también reconocieron que tenía adicción al alcohol y que solía beber en exceso.

El taller quedó cerrado y preservado por orden judicial, mientras se realizan las pericias de rigor para determinar las circunstancias del hecho. El fiscal Francisco Micheltorena y el ayudante fiscal Adrián Elizondo están a cargo de la investigación.