Perro que mata, ¿puede volver a convivir con las personas?
A raíz del caso del pitbull que atacó y mató a una nena en Rawson, un experto canino contó cómo sigue la vida de los animales.
Luego del ataque mortal a una niña de nueve años de edad en el barrio Malimán por parte de un pitbull, un gran interrogante que surgió es si esta clase de perros pueden rehabilitarse y dejar de ser tan violentos. En relación a esto Roberto Bastianelli, conductista canino, expresó que si bien la mayoría de personas terminan sacrificando a estos animales, pueden recuperarse y vivir nuevamente con seres humanos.
Bastianelli explicó que estos perros en su mayoría terminan siendo sacrificados, siendo que existe la posibilidad de recuperaros. El conductista manifestó que este animal deberá someterse a sesiones de rehabilitación por el resto de su vida, para evitar que este tipo de ataques se repitan en un futuro.
El especialista comparó la situación de estos animales con la de una persona adicta a alguna sustancia, mencionando que de igual manera ambos pueden volver a reincidir si es que dejan acudir a sus sesiones de rehabilitación, destacando que él es el único que ofrece este tipo de servicio en la provincia de San Juan.
Bastianelli aclaró que esto sucede porque la gente tiene la costumbre de llevar animales grandes a su casa, siendo que "un perro que pesa más de 10 kilos no es una mascota, es un animal que tiene la capacidad física para matar". Si bien aclaró que esto no quiere decir que todos sean asesinos, el experto aseguró que si lo desean pueden terminar con la vida de una persona.
"Esto pasa porque la gente lleva a su casa a los perros, no los educan, no los entrenan, no tienen ningún control sobre ellos, pero igual lo meten a casa, inclusive si hay niños", reflexionó el conductista. Acerca de esta problemática el sanjuanino declaró que poner a un perro junto a un niño es una aberración "porque en algún momento los niños le van a tirar el pelo, la cola o las orejas y el perro va a reaccionar tirando una mordida que es de corrección. Lo que pasa que para un niño toda mordida es grave".
Sumado a esto Roberto Bastianelli contó que se ha vuelto algo muy habitual que para fechas como navidad, los padres le regalen a sus hijos un cachorrito para que jueguen con él. Sobre estas prácticas el profesional advirtió: "un perro no es un juguete, es un ser vivo que tiene sentimientos y sufre. No puedo someterlo a la tortura de un niño que no sabe jugar. Los perros tienen códigos que el niño no tiene porqué conocer".
Finalmente el reconocido conductista canino dijo que este tipo de situaciones no son culpa de los animales, sino de las personas que los llevan a su casa sin tomarse el trabajo de enseñarles a como comportarse. "El problema nunca es el perro, el problema es el humano que no sabe educarlo", sentenció.