La tarde del 31 de diciembre, la tranquilidad en la unidad operativa Chimbas Este, ubicada en Villa del Sur, se vio interrumpida por un desesperado pedido de auxilio. Noelia Zárate llegó al lugar cargando a su hija de 3 años, Nazli Mariana Argañaraz, quien no presentaba signos vitales tras sufrir un episodio de convulsión.

Los agentes Milagros Riveros y Víctor Brizuela no dudaron un segundo. Iniciaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) para intentar salvar a la pequeña mientras un móvil del Comando Radioeléctrico Norte, a cargo del oficial ayudante Francisco González y el cabo Jorge Mercado, se preparaba para trasladar de urgencia a la niña y su madre al Centro de Salud Báez Laspiur.

Durante el trayecto, la agente Riveros y el oficial González continuaron realizando maniobras de RCP, en un esfuerzo conjunto por mantener con vida a Nazli.

Gracias a la rápida respuesta y coordinación del equipo policial, la pequeña logró recuperar sus signos vitales antes de llegar al centro de salud, donde recibió atención médica especializada.