Una situación totalmente indignante se produjo recientemente en la provincia de Córdoba. Lo que sucedió fue que los trabajadores de un sanatorio cometieron un grave error y les entregaron los cadáveres equivocados a dos familias. El problema surgió cuando uno de los cuerpos sin vidas fue cremado.

Todo sucedió luego del fallecimiento de un adulto mayor llamado Abel Moris de 89 años de edad. Luego de un tiempo de estar internado en un sanatorio cordobés. el hombre no resistió más la cirrosis hepática que lo aquejaba y terminó falleciendo. Sus familiares fueron notificados del deceso, por lo que ellos pidieron que les entregaran su cuerpo sin vida.

Tiempo después los seres queridos de Moris fueron contactados por autoridades del centro asistencial, quienes les pidieron que fueron al sanatorio en cuestión. Una vez que llegaron al lugar pensaban que les iban a entregar los restos del abuelo, pero en realidad les comunicaron que habían cometido un error el cadáver de Abel fue entregado a otra familia.

Este segundo fallecido, del que no trascendió la identidad, había sido víctima del Covid 19 por lo que sus amigos decidieron cremarlo. De esta manera lo que quedaba de este señor que sucumbió a manos de la cirrosis, fue reducido a cenizas por personas totalmente desconocidas. Actualmente el caso quedó en manos de Tribunales II de Córdoba.