A pocos días de haber ganado el Martín Fierro de oro, "Gran Hermano" vive momentos tensos por problemas en las relaciones entre sus participantes.

Luego de la separación de Coti y el Conejo, ahora se conoció la ruptura definitiva entre Maxi y Juliana, apodada Tini dentro de la competencia.

A través de sus redes sociales, la bella joven comunicó: “Este video lo hago porque mucho se están preguntando y es sobre Maxi y yo. La realidad es que hace poquitos días tomamos la decisión de separarnos. Nos costó muchísimo. Estábamos en un momento muy en paz, muy bien, muy felices y no entendíamos el porqué de los rumores”, comenzó diciendo la joven.

“Creo que de alguna u otra manera esos rumores nos llevaron a recapacitar un montón de cosas de nuestra relación. Nos dimos cuenta que estamos en un momento de nuestras vidas que es fundamental y es clave para conseguir todas las cosas que nosotros querramos. Para cumplir nuestros sueños y metas", agregó.

Y continuó: “Lamentablemente con Maxi, como pasó adentro de la casa, vivimos en una burbuja y dejamos de socializar, de hacer, de crecer. Y de hacer cosas de un modo individualista, para nosotros mismos. Nos dimos cuenta que estamos herméticos en nuestra relación".

Confirmado que la separación se dio en buenos términos, Tini agregó: “Nos dimos cuenta, gracias a Dios, a tiempo y de la manera más sana del mundo que no nos estábamos sumando. Si uno estaba triste, el otro estaba triste. Si uno estaba bien, el otro estaba bien. Y era una dependencia emocional de parte de los dos que no nos estaba dejando ser de manera individual”.

“Me atrevo a decir que el amor está intacto y nos amamos. Creo que el acto de amor más grande que pude haber hecho es irme. Nosotros nos conocimos y nos apegamos muchísimo y no nos separamos nunca más. Si bien es hermoso, nosotros hoy por hoy nos está costando trabajo, nos está costando sueños, nos está costando oportunidades y es difícil tener que elegir entre el amor o las metas y los sueños”.

"Nos pusimos de acuerdo para ponerle puntos suspensivos a nuestra historia. Nos estamos empujando el uno con el otro para abajo y ninguno está pudiendo salir a flote. Somos conscientes y pudimos darnos cuenta a tiempo de que este es el momento más sano para que nosotros tengamos nuestros caminos, nuestro aire y nuestro espacio. Si Dios, el universo, o quién sea que sea quiere, vamos a volver a estar juntos, yo no tengo dudas. Sigo pensando que es el amor de mi vida y no hay nada que cambie el cariño que yo le tengo a él y yo creo que de su parte es igual”.