En la madrugada del viernes, un potente sismo de magnitud 7,2 sacudió la costa del sur de Perú, poniendo en alerta a todo el país. El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGC) reportó que el epicentro se localizó en el océano, a una profundidad de 28 kilómetros y a una distancia de 8 km de Arequipa. Según el Instituto Geofísico del Perú (IGP), el epicentro se ubicó en el distrito de Yauca, a 54 km al suroeste de Yauca, Caravelí, Arequipa, y ocurrió a las 00:36 horas, con una profundidad de 42 km.

Gustavo Adrianzén, presidente del Consejo de Ministros, informó que no se han registrado víctimas mortales, aunque sí se reportaron daños considerables y continuaban analizando la situación. "Hasta esta hora no tenemos registradas víctimas fatales. Hubo daños, sí, hubo afectación hasta este momento menor y mediana en algunos inmuebles, pero no hay hasta este momento víctimas fatales que lamentar", declaró Adrianzén.

Las redes sociales se llenaron rápidamente de fotos y videos que capturaron el momento del temblor y sus efectos inmediatos. Usuarios compartieron imágenes de sus hogares, mostrando objetos caídos, pistas agrietadas y daños estructurales menores. Videos caseros revelaron la intensidad del sismo, con lámparas balanceándose y personas saliendo apresuradamente de sus casas en busca de seguridad.

El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico (PTWC) anunció que "la amenaza de tsunami de este terremoto ya pasó". Adrianzén confirmó en la emisora local RPP que la alerta de tsunami fue descartada, aunque se espera oleaje anómalo en las costas. "Estoy en condiciones de advertir que lo que puede significar un tsunami ha sido descartado. Esto no significa, por supuesto, que no tengamos que ser testigos de algún oleaje anómalo, pero no va a haber un tsunami. Esa es la información que hemos recibido. Así que por allí, tranquilidad también a nuestras poblaciones del litoral. No va a haber tsunami", dijo en RPP.

El ministro instó a la población de las zonas afectadas a mantener la calma y permanecer en lugares seguros. Los residentes de Arequipa describieron el temblor como muy fuerte y prolongado, causando temor y evacuaciones apresuradas. "Las camas temblaron y la gente estaba asustada", comentaron algunos testigos. El temblor se percibió hasta la capital, Lima, y fue seguido por réplicas de magnitudes 4 y 4,2.

La Presidencia de Perú comunicó en X que el Gobierno está monitoreando la situación y evaluando los posibles daños. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones informó que se activaron los protocolos de emergencia y se está monitoreando el estado de las carreteras, puertos y aeropuertos en la zona afectada de Arequipa.