Un hombre británico de 32 años estuvo al borde de la muerte después de que un extraño gusano se le introdujo en el pene tras unas vacaciones que pasó con unos amigos en África.

El joven comenzó a ver extrañas manchas en su cuerpo y a sentir fuertes dolores en las  piernas. Cuando fue a un hospital le dijeron que estaba en peligro porque un parásito que había entrado por su pene y le estaba dejando huevos dentro de su cuerpo.

Todo comenzó en agosto de 2017 cuando James Michael se fue de vacaciones a África con tres amigos. Los hombres decidieron hacer la despedida del viaje nadando en el lago Malawi.

"Fuimos a navegar al lago en canoa y yo decidí tirarme al lago en un momento de locura y diversión. Fue algo inocente", dijo. Un mes después de volver a casa comenzó a sentir adormecimiento en sus piernas y pensó que podría deberse a la falta de ejercicio.

Cuando fue al médico, los especialistas le dieron antibióticos, pero no sirvieron para mejorarlo. Entonces lo sometieron a nuevos estudios.

Tras semanas de investigación, le diagnosticaron esquistosomiasis, una infección causada por un gusano parásito que vive en las aguas dulces en regiones tropicales. Este parásito se había arrastrado por su pene y había puesto huevos en todo su cuerpo.

Finalmente, los médicos pudieron atacar al parásito con un medicamento llamado prazicuantel que mató la infección. Igualmente, el hombre quedó muy débil y los especialistas le dijeron que había un 30 por ciento de posibilidades de que se recupere por completo dentro de 10 años.

"Al principio de mi recuperación, tuve un brote de acné terrible que recorrió mi espalda y brazos. No pude dormir durante un mes, me dolía acostarme. No podía estar bajo el agua corriente y no podía recibir ni los abrazos de mi novia. Todo esto afectó mi vida por completo. Esto ha sido horrible. Se siente como una montaña interminable que he tenido que escalar", concluyó.

Fuente: Crónica