El hallazgo de un fósil de más de 230 millones de años en Ischigualasto puso a San Juan nuevamente en los ojos del mundo. Se trata de una especie bautizada como el ancestro de los lagartos.

Ricardo Martínez, el investigador del Instituto y Museo de Ciencias Naturales de la UNSJ, fue el descubridor de este reptil en el año 2001. Este miércoles, 20 años después, su trabajo fue publicado por la prestigiosa revista científica Nature. Este logro fue celebrado por las Universidad Nacional de San Juan.

En conferencia de prensa, el científico contó detalles sobre el hallazgo y puso en valor la riqueza paleontológica de Ischigualasto. “Para nosotros es un orgullo porque muy difícil publicar en esta revista. El trabajo tiene que ser muy relevante a nivel ciencias naturales en el mundo, no solo en paleontología. Por eso, la publicación de Nature resalta la importancia de San Juan una vez más como un yacimiento paleontológico único en el mundo y va a seguir dando que hablar en el futuro”, aseguró.

Durante su discurso, el científico comentó cómo se gestó la campaña en la que fue descubierto este fósil. Todo ocurrió en el año 2001, en medio del desconcierto mundial que provoco el atentado de las Torres Gemelas. En ese entonces, el equipo de investigadores sanjuaninos, esperaba la llegada de voluntarios desde Estados Unidos que iban a participar de la exploración a través de un programa financiado por la Fundación Airwatch. “La fundación financiaba la campaña a través del envió de voluntarios que pagaban para eso”, comentó.

Sin embargo, el atentado en Norteamérica puso en vilo la realización de la excursión, pero finalmente se pudo concretar. Lo que siguió después fue el descubrimiento del fósil que 20 años más tarde se convirtió en un jito para las ciencias naturales.

Martínez recordó el momento preciso del hallazgo. “Sin saberlo uno de los fotógrafos voluntarios, documentó el descubrimiento del bichito con su cámara. Es algo que no pasa nunca. Por lo general la foto de los descubrimientos se recrean, pero esa vez fue real. El capturó el momento en el que yo estaba excavando y tomó las fotos de cuando recogí el fósil y les pego el grito a los demás miembros del equipo para avisarles que había encontrado algo bueno. En ese momento sabía que era algo nuevo y desconocido para Ischigualasto”, comentó.

La siguiente etapa duró casi 20 años de investigación para concluir que el fósil es el ancestro de los lapidosaurios. Para poder conocer las características del cráneo, hizo falta un trabajo de preparación de varios años que consistió en trabajar el fósil hasta separarlo del sedimento en el que se encontraba.

Luego, viajaron a Estados Unidos, específicamente a la Universidad de Texas donde realizaron una tomografía especial para fósiles y de esa manera pudieron conocer en profundidad las características del cráneo.

De esa manera, pudieron estudiar en detalle la estructura del fósil y descubrieron que se trata de un representante temprano de lo que hoy se conocen como lagartos, serpientes y otros animales con escamas.

El animal, convivió con primitivos dinosaurios en el periodo triásico en Ischigualasto cuando la tierra era una sola masa de tierra llamada Pangea. En ese lugar se desarrolló el Taytalura Alcoberi.

El investigador, destaco también el trabajo de los investigadores sanjuaninos que trabajan día a día en Ischigualasto. “Más de 40 años de investigación en el área, por parte deI Instituto y Museo de Ciencias Naturales han dado a conocer una abundante fauna que vivió hace 231 millones de años en San Juan y que incluye a los dinosaurios más primitivos en el mundo. Por eso la importancia del yacimiento. También vivieron con los dinosaurios otro tipo de fauna como los antecesores de mamíferos y cocodrilos que completaban la fauna de ese momento”, indicó.

Por último, dijo que “apuntaron bien alto” al enviar el trabajo a la revista Nature para que sea evaluado por otros científicos, quienes finalmente destacaron el trabajo realizado en la provincia y que fue finalmente publicado en la prensa internacional.