Fiestas: ¿suben las ventas? Las expectativas de los artesanos
Fuertemente castigados por la pandemia, estos trabajadores renuevan las esperanzas de mejorar sus ingresos en vísperas de Navidad y Año Nuevo.
Entre los más castigados de la pandemia se encuentra los trabajadores artesanos, dependientes del flujo peatonal de personas y de las visitas de los turistas, situación que se vio alterada negativamente por la situación sanitaria. En el marco de las fiestas de fin de año, estos laburantes que ponen un empeño especial en cada trabajo, haciendo cada objeto único, renuevan las esperanzas de mejorar sus ventas.
En diálogo con el móvil de Canal 13, los artesanos Rodrigo, Sebastián y Ángel, apostados en calle Ignacio de la Roza y Avenida Rioja brindan un panorama sobre el movimiento económico de cara a Navidad y Año Nuevo. “Se acerca la gente a pesar del calor y preguntan bastante, hay ventas también. Por suerte hemos tenido bastante visita de turistas”, dijo Rodrigo que ofrece una gran variedad de cuchillos artesanales de todos los tamaños y para todos los usos.
Los precios van desde los 1000 hasta los 4000 dependiendo del tamaño y el modelo, “lo que más lleva la gente es para asado, lo más simple”, expresó.
En el mismo sentido, Sebastián, un trabajador del cuero que elabora todo tipo de productos a base de este noble material, dijo, “gracias a Dios estamos vendiendo en la previa de las fiestas, la gente concurre. Estamos en horario de comercio, un ratito más en la fiesta trabajando mejor que otros años”.
Uno de los productos más vendidos de Sebastián, a pesar del calor es el mate, lo que constituye la venta mayoritaria para el artesano. “El mate es un producto que en el verano se sigue vendiendo porque la gente sale de camping, sale a pasear y consume bastante”, dijo y agregó, “después tenemos cintos, billeteras, riñoneras y carteritas. Son cosas que las fabricamos acá en Santa Lucia, es mano de obra propia somos artesanos de la Capital”.
Ángel, un experimentado trabajador de la piedra y amante de la naturaleza, que fábrica colgantes y pulseras aseguró que todo viene un poco lento, pero bien, “lo más importante que haya un poquito de movimiento y tener donde uno pueda trabajar, poco o mucho”.
Una de las estrategias para aumentar las ventas es estar más tiempo, “el año pasado no ha habido ventas. Los artesanos fuimos los más castigados por que estuvimos casi un año sin poder trabajar” dijo y agregó, “tiempo después de la remodelación de la peatonal nos trasladaron a la Plaza 25, estuvimos unos meses ahí y después nos fuimos a la Tucumán entre Laprida y Libertador y después en el último aislamiento de los nueve días no nos renovaron el permiso hasta hace un par de meses acá. El covid no permitía la actividad”.