A las 23:46 del lunes 18 de enero de 2021, San Juan registró un terremoto que causó temor en la población. Si bien inevitablemente lo ocurrido en 1944 y 1977 vino a la mente, quedó demostrado que los modernos métodos de construcción evitaron otra gran tragedia. Sin embargo, a nivel estructural hubo miles de edificios que sufrieron importantes daños. Entre ellos se encuentra la Parroquia de Santo Domingo, la cual se encuentra inhabitable hasta la actualidad.

Cuando uno camina por Av. Libertador y calle Entre Ríos, siente que el tiempo se hubiera pausado en esa esquina. La imponente iglesia se encuentra prácticamente igual que hace 4 años. Lo único que parece haber cambiado es que algunos vándalos realizaron graffitis y otras pintadas en el frente del templo. El Fray Fernando Reta, quien ocupaba el rol de Prior de la orden de los dominicos en Cuyo, confirmó a Diario 13 esta información.

Una de las pintadas que ensuciaron el frente de la iglesia
Una de las pintadas que ensuciaron el frente de la iglesia

‘Hasta la fecha, en lo que es la iglesia, no se ha realizado ningún arreglo de ningún tipo directamente. Está igual desde el 2021’, expresó. De esta manera, los daños que sufrió la parroquia a raíz de aquel temblor de 6.4 grados no han sido reparados. El movimiento telúrico ocasionó enormes grietas que afectaron mayormente a la pared frontal, las cuales son fácilmente visibles desde la vereda, y una lateral.

Esto provocó que ya no se pudieran realizar misas ni cualquier tipo de actividad dentro de la iglesia. Directamente está prohibido entrar, está clausurada. No puede ingresar nadie porque si llega a ocurrir algún desprendimiento, nosotros somos los responsables legalmente ante algún accidente’, manifestó Reta.

Gritas y pintadas, la triste actualidad de Santo Domingo
Gritas y pintadas, la triste actualidad de Santo Domingo

Si bien en un principio hubo intenciones de hacer realidad las reparaciones necesarias, ese deseo se esfumó por un claro motivo: la falta de dinero. Un equipo de arquitectos había realizado un minucioso estudio de las condiciones del edificio. En ese momento se concluyó que, afortunadamente, no hacía falta demoler el palacio para volver a edificar, sino que había que reforzar simplemente. 

Había que cambiar el cielorraso del techo por paneles de fibra de carbono y construir vigas de acero enrejado. A pesar de no tener que tirar abajo las paredes, desde la orden de los dominicos nunca pudieron hacer la recaudación necesaria para hacer frente a estas reparaciones. 

Esta situación provocó que, por ejemplo, en el 2024 se tomara la decisión de retirar del lugar la urna con las cenizas de las víctimas del terremoto de 1944. Luego de que se cumplieran 80 años de aquella tragedia, se tomó la determinación de llevar este objeto con tanto valor simbólico y sentimental a la Catedral. El objetivo fue básicamente que la urna volviera a ser de acceso público, ya que nadie puede ingresar a Santo Domingo.

La urna con las cenizas de los fallecidos en 1944
La urna con las cenizas de los fallecidos en 1944

Otro hecho realmente lamentable, de una índole totalmente diferente, sucedió el pasado lunes 13 de enero. Sobre el mediodía, Cristian Guillermo Leoz, encargado de la iglesia, llegó al lugar y se encontró con la puerta principal violentada. Al toparse con este escenario, rápidamente ingresó para ver qué hicieron los intrusos en el interior. Así fue como descubrió que rompieron dos urnas y se robaron una computadora de escritorio completa.

De este modo, parece que a los fieles no les queda otra opción que rezar y tener fe para que esta situación cambie, para que este gigante que permanece dormido hace 4 años se despierte en algún momento. Lamentablemente, por el momento no hay indicios de que esta reapertura vaya a ocurrir en el corto o mediano plazo.

Santo Domingo, la parroquia que quedó detenida en el tiempo desde 2021