Pamela Olivera, quiere reunirse con su hermana melliza. La sanjuanina explicó que sospecha que ellas fueron separadas al nacer y cree que podría haber sido sustraída en el hospital de nacimiento. Entre las novedades de su caso, expresó en Diario 13 que no deja de buscarla y que tiene nuevas pistas. 

Pamela comenzó la búsqueda de su hermana hace muchos años. Durante mucho tiempo no tuvo pistas y las redes sociales se volvieron el lugar donde más rastros trata de hallar. Justamente en Facebook, es donde encontró algo, que, para ella, puede abrirle nuevas puertas. La joven comentó que a través de las redes sociales encontró una chica que es muy parecida a ella y que está esperando una respuesta.

"Hay una chica muy parecida, pero no me contesta por redes sociales", explicó Pamela y dijo que está esperanzada de que la falta de respuesta se deba a que esta mujer no tenga una vida virtual muy activa.

La historia de Pamela y su hermana posiblemente robada

Actualmente, Pamela reside en Buenos Aires, está casada y es madre de un hijo. No obstante, le falta resolver una cuestión vital: reunir a toda su familia, para lo cual requiere encontrar a su hermana. Tanto ella como su entorno creen que su hermana fue arrebatada de su madre en el momento del parto. 

La historia remonta a su niñez, cuando su familia se trasladó a Cañuelas, provincia de Buenos Aires, debido a una oportunidad laboral de su padre. Aunque pasaron varios años en este nuevo lugar, finalmente regresaron a San Juan. A los 12 años, la vida de Pamela tomó un giro inesperado. En ese momento, su madre reveló que existía una hermana melliza, aunque no profundizó en los detalles en ese momento.

La curiosidad y la intuición impulsaron a Pamela a buscar respuestas. A través de investigaciones, logró descubrir el potencial nombre de su hermana y detalles que le permitieron reconstruir la historia de su separación. A pesar de los obstáculos, perseveró con determinación, consciente de que en casos anteriores, personal médico y enfermeras habían estado involucrados en la venta y alteración de registros de nacimiento. Estos tristes hechos la motivaron aún más.

Un día, Pamela se topó con una publicación en redes sociales de una persona que también buscaba a su familia. Esta coincidencia resonó en su corazón y le dio el coraje necesario para seguir adelante. La búsqueda de su hermana se convirtió en una misión de amor inmenso. 

Pamela compartió detalles sobre el presunto "robo" de su hermana, que ocurrió durante el parto. En ese momento, los médicos hicieron creer a su madre que solo había dado a luz a un bebé. Aunque escuchó otro llanto, su madre no pudo comprender lo que estaba sucediendo. Pamela recuerda: "Mi mamá me contó que el médico le quería hacer un aborto, pero ella se negó. La enfermera le pidió que le diera un bebé, pero ella se negó. Durante el parto, le dijeron que sentiría otro parto pero que la placenta era muy grande".

A los 13 años, las tías de Pamela visitaron el sanatorio donde tuvo lugar el nacimiento y descubrieron que ese día hubo dos partos realizados por el mismo médico, a pesar de que su madre aseguró que estuvo sola en la sala. Con el tiempo, Pamela logró obtener más información, incluyendo el nombre de su hermana. Si bien visitó su hogar, su familia no dejo que la vea ni le dieron la posibilidad de algún tipo de contacto. 

Pamela tiene una convicción inquebrantable: "Sé que encontraré a mi hermana". Su objetivo es similar al de muchas personas que buscan a sus seres queridos después de años de separación. "Han pasado 36 años. Me gustaría poder unir historias. Siempre sentí que estoy conectada con otra persona. No sé cómo explicarlo. Tengo 3 hermanos más. Y me gustaría encontrar a mi melliza para cerrar esta historia". A pesar de los años de silencio y los desafíos, su deseo de reconstruir la historia de su familia es más fuerte que nunca.