Un reconocido actor sorprendió a los alumnos de la 'escuela del cielo' en Iglesia
La celebridad estuvo prácticamente todo el día en el lugar, cantando con los chicos y comiendo sopaipillas.
Los alumnos de la Escuela Miguel Cané vivieron algo increíble durante el pasado martes 11 de marzo. Se trata de que, de forma sorpresiva, el reconocido actor Facundo Arana llegó al establecimiento y pasó gran parte del día acompañándolos.
Javier Ortíz, director de la llamada ‘escuela del cielo’, al estar a más de 2500 metros de altura sobre el nivel del mar, explicó toda esta experiencia a Diario 13. El entrevistado reveló que todo fue posible gracias a una empresa que suele asistirlos de vez en cuando.
‘Cerca de nosotros hay parques solares que han comenzado a trabajar hace un par de años y uno de ellos es de YPF Luz. Con esa gente hemos tenido contacto, ya que ellos empezaron a colaborar con cosas que yo les pedía y, bueno, surgió esto de que aparentemente Facundo Arana sea la cara visible de su parte social. Entonces me dijeron que posiblemente venía’, expresó.
Los representantes de esta firma se comunicaron con Ortíz hace semanas. Le comentaron la posibilidad de que Arana visitara la institución y si bien él aceptó, reconoció que internamente pensó que la celebridad argentina no se iba a presentar.
‘El martes me empezaron a mandar mensajes diciendo que ya había llegado. Tipo 10:00 u 11:00 apareció por la escuela con todo el equipo de producción. Estuvimos ahí toda la mañana en la escuela y fue muy espectacular. La verdad es que es fabuloso, yo no lo conocía y es un tipo que tiene una gran humildad. Tuvimos un día fantástico, muy bueno’, comentó.
El director de la institución remarcó la buena predisposición que tuvo el artista para compartir con los menores de edad. Directamente luego de filmar lo que necesitaban para la producción que estaban realizando, hasta se tomó el tiempo de grabar TikToks con los pequeños.
‘Filmaron para hacer un tipo de documental que va a salir en Telefé y el resto del tiempo estuvo con los niños, estuvo en el aula, charló con cada uno de ellos. Les preguntó cuál era su sueño y les dijo que los sueños eran posibles de realizar. Él contó anécdotas de su vida y los incentivó a que siguieran estudiando. Yo a él le invité unos pasteles y unas tortas fritas’, manifestó.