La semana pasada, en el programa Más Allá de las Noticias, el Dr. Gustavo Alcalá, experto cardiólogo, presentó una novedad relevante para la cardiología en Argentina. El Dr. Alcalá, recién llegado de un congreso en Córdoba, compartió los detalles sobre la Red de Infartos de Córdoba, una iniciativa que ha transformado la atención de urgencias cardíacas en la provincia desde su implementación en 2017 por resolución ministerial.

La Red de Infartos de Córdoba es un sistema coordinado que permite que cualquier persona con un dolor precordial sospechoso de infarto pueda comunicarse inmediatamente con una red que gestiona la recepción de datos mínimos, como el electrocardiograma y otras imágenes necesarias, a través de WhatsApp. El doctor explicó que 'cuando efectivamente se cumplen ciertos requisitos, se activa esta red de infarto que tiene su nodo principal en el Hospital Córdoba y otros nodos más en toda la provincia: Río Cuarto, Villa María y San Roque'.

El funcionamiento de esta red es crucial en casos confirmados de infarto de miocardio, donde un experto analiza el electrocardiograma y, si se confirma el infarto, se activa la red: "Todos los jefes de servicio, o alguien designado, de los hospitales principales asignan una cama y los profesionales entrenados pueden abrir una arteria en 30 minutos o menos," detalló el Dr. Alcalá. En algunos casos, hay demoras debido a la ubicación geográfica, pero los pacientes son medicados mientras tanto con fármacos que pueden disolver un coágulo en los primeros 60 minutos, conocidos como la "hora de oro".

Desde su implementación, este sistema ha logrado reducir la mortalidad inmediata del infarto de miocardio a la mitad. "Antes del 2017, en las primeras horas o días, se moría un 10% de los pacientes con infarto de miocardio, aun con el mejor tratamiento. Ahora, esa cifra ha bajado al 5%," afirmó el cardiólogo. 

Sin embargo, el Dr. Alcalá subrayó que hay tareas pendientes para el Gobierno de Córdoba, como ampliar la red para incluir más clínicas y generar la tecnología y capacidad humana necesarias en áreas donde frecuentemente se producen demoras. Además, mencionó la necesidad de lugares especializados para el cuidado posterior de los pacientes, quienes no deben esperar en el mismo lugar que aquellos con consultas menos urgentes.

El Dr. Alcalá también reflexionó sobre la posibilidad de replicar este modelo en otras provincias, como San Juan: "En San Juan, día por medio hay alguien que tiene un infarto de miocardio donde los minutos cuentan. San Juan probablemente no tenga que copiar y pegar el modelo de Córdoba, pero es fundamental diseñar una red de infarto específica para la provincia, considerando su particularidad geográfica," sugirió. San Juan tiene pocos valles poblados, lo que hace crucial una evaluación de riesgo inmediata para los pacientes con infarto de miocardio.

El experto también destacó la importancia de que las provincias participen activamente en congresos, no solo para escuchar, sino también para mostrar su realidad: "La Federación Argentina de Cardiología tiene como objetivo que el acceso a la salud de calidad sea lo más federal posible. Esta posibilidad de abrir una arteria en medio de una urgencia no existía antes de 1995, y Córdoba es un ejemplo nacional que merece ser considerado," concluyó el Dr. Alcalá.

Este modelo de atención de urgencias cardíacas no solo ha demostrado ser efectivo, sino que también ofrece una guía para otras regiones del país, promoviendo una atención más rápida y eficiente para los pacientes con infarto de miocardio.