Franco Vicente Gómez y Julio Castro Agüero son los presuntos acusados por cometer un homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego. Es decir, de haber matado a Diego Andreoni que el pasado 15 de marzo se encontró jugando un partido en un complejo de canchas en Rivadavia. Quiso intervenir para frenar una gresca y recibió un disparo que luego de dos semanas terminó con su vida. 

El fiscal Ivan Grassi confirmó que “se les va a hacer saber en una audiencia cuál es la situación de la causa. Las dos personas serán notificadas. Ya que según la palabra de los testigos, Agüero le disparó, pero Gómez le habría pasado el arma. Vamos a pulir la investigación para ver si el último sigue ligado" . 

Pese a esto, ambos serán investigados bajo la misma carátula por homicidio simple con agravante por arma de fuego.  

“Cuando tiene un agravante como el arma de fuego, la pena aumenta. Es decir, si es homicidio en la escala penal es de 15 a 25 años y con agravante hasta 31 años", afirmó Grassi. 

Según este criterio y bajo la ya mencionada carátula, los acusados podrían ir al Penal aproximadamente 30 años. 

Durante la audiencia del juicio abreviado llevado a cabo esta semana, Agüero reconoció el disparo y pidió disculpas. Mientras que Gómez lo negó todo. El arma, según el fiscal Grassi, sigue sin encontrarse lo que sería clave para determinar la circunstancia de quién pasó el arma a quién.